Las negociaciones comerciales han sido duras. México y Estados Unidos mantenían posturas enfrentadas respecto al TLCAN. Sin embargo, finalmente se ha alcanzado un nuevo acuerdo comercial: el USMCA. Y es que, México, junto a China, Canadá y Japón es uno de los principales exportadores a Estados Unidos. En Economipedia analizamos cómo afecta el USMCA a la economía mexicana.
La industria automovilística: el gran protagonista de las negociaciones
Tanto en Estados Unidos como en México se cuestiona si el USMCA es mejor o peor que el TLCAN. Sea como fuere, lo que parece quedar claro es que no todas las industrias quedarán igual paradas. Vivo ejemplo de ello será la industria automovilística. La cual ha sido uno de los puntos centrales del tratado.
Así, parece que en este sentido, México se verá perjudicado. El nuevo acuerdo impone que al menos entre el 40% y el 45% de los automóviles sean fabricados por trabajadores que perciban un salario que alcance al menos los 16 dólares la hora. Aquí, podría afirmarse que México sale perdiendo. Ya que la industria mexicana podía producir coches a un menor coste, debido en parte a los menores salarios que percibían sus trabajadores. Si todo sigue su curso, esto terminará afectando a un 32% de las plantas automovilísticas de México.
Si bien es cierto, que esta exigencia del USMCA buscará reducir las diferencias salariales entre los trabajadores mexicanos y estadounidenses, tratando de alcanzar un equilibrio competitivo en lo que a costes laborales se refiere.
El límite arancelario en la industria automovilística
Otro punto a destacar respecto a las exportaciones de automóviles a Estados Unidos es la cuota de 2,6 millones de vehículos. Cabe recordar que a partir de esta cifra, el gobierno estadounidense podrá imponer aranceles. No obstante, parece que la mayor parte de la industria mexicana del que podrá adaptarse a este límite.
Al igual que las empresas automovilísticas de Canadá y Estados Unidos, los fabricantes mexicanos deberán adaptarse a las nuevas exigencias. Las nuevas normas del tratado establecen que el 75% de un automóvil debe estar fabricado con piezas procedentes de Estados Unidos, Canadá o México. Entre los cuales, como no, se encuentra México. Así pues, esto terminará por afectar a las importaciones de los tres países firmantes.
Dado lo anterior, los fabricantes mexicanos se verán obligados a reducir las importaciones de hierro, aluminio y cristal que proceden de áreas como Sudamérica, Europa y Asia.
El sector textil y los avances en el comercio electrónico
De la misma forma, en el sector textil se han impuesto obligaciones para trabajar con productos fabricados en el área de América del Norte. Por ello, la empresa petroquímica mexicana ALPEK, puede verse beneficiada. Ya que algunos de sus productos son necesarios para la industria textil. Por ejemplo, las fibras de poliéster.
Uno de los puntos débiles del antiguo TLCAN era el comercio electrónico. Gracias al nuevo acuerdo, nuevos horizontes se abrirán para los consumidores mexicanos, que gracias al comercio electrónico podrán adquirir un mayor tope máximo de productos libres de aranceles.
Antes de la firma del tratado, los mexicanos que adquirían productos vía comercio electrónico pagaban aranceles por importes superiores a los 50 dólares, sin embargo, ahora esa barrera se verá aumentada a los 100 dólares.
Las compras transfronterizas: libres de impuestos hasta los 117 dólares
También las compras en las fronteras se verán beneficiadas. Un claro ejemplo es que los mexicanos que realicen compras transfronterizas por importe de 117 dólares o cantidades inferiores quedarán libres de impuestos. Con esta medida se fomentará el comercio entre pequeñas y medianas empresas. Las cuales, están especialmente implicadas en el denominado comercio transfronterizo.
Por tanto, a través de las iniciativas propuestas en comercio transfronterizo y comercio electrónico se espera estimular la actividad de la pequeña y mediana empresa, que podrá abrirse camino no solo en el mercado mexicano, sino también en el canadiense.
Un mejor acceso a financiación externa
Los mercados y los indicadores de riesgos son siempre muy sensibles a los acontecimientos políticos y económicos. Planeaba el riesgo del estallido de una nueva guerra comercial. Sin embargo, el acuerdo del USMCA ha contribuido a rebajar los temores que expresaban los principales indicadores de riesgo.
Un claro ejemplo es el indicador JPMorgan EMBI+ Mexico Index. Indicador, dicho sea de paso, que mide el riesgo país. A mediados de junio, en pleno auge de las tensiones comerciales se situaba en los 231 puntos. Mientras que, tras ser alcanzado el acuerdo (3 de octubre de 2018), ha disminuido considerablemente, situándose en los 177 puntos.
Esto se explica porque la experiencia ha probado que cuando se impone el proteccionismo, las economías se contraen. De ahí que en junio los indicadores de riesgo fuesen elevados. Pero ahora, con el acuerdo del USMCA, parecen haberse disipado los temores y las perspectivas económicas para México se muestran más esperanzadoras. Algo que, sin duda, explica la caída de sus indicadores de riesgo.
Otro de los efectos positivos del USMCA sobre la economía es la caída del diferencial de tasas entre México y Estados Unidos. De este modo, México podrá refinanciar mejor su deuda externa y dispondrá de unas mejores condiciones para conseguir financiación externa. Todo esto contribuirá de manera importante en la financiación de México, que está inmerso en la elaboración de los presupuestos de 2019.
En conclusión, aunque aún queda por ver cómo evolucionan los acontecimientos, parece que el libre comercio ganará la batalla. No todo son ventajas, pero la economía Mexicana saldrá favorecida del acuerdo.