Actualmente hay una variedad de ofertas de tarjetas de crédito abismal. A muchos hogares por unas cosas o por otras, les cuesta mucho llegar a fin de mes y utilizan este tipo de tarjetas para realizar esos gastos antes de cobrar el sueldo.
Son muchos los hogares los que utilizan tarjetas de crédito. No solo por necesidad, también para permitirse algún capricho. A veces, la cuantía es tan pequeña que ni siquiera se plantean pedir un préstamo, simplemente utilizan su tarjeta de crédito.
¡Ojo! Antes de nada, recuerda que no es lo mismo una tarjeta de crédito que una de débito. Aquí hablamos de tarjetas de crédito. Sí, esas tarjetas que tienen un capital disponible y que te permiten pagar a plazos.
Aunque, a priori, pueden parecer un excelente instrumento para financiar las compras sin necesidad de tener que ir al banco a solicitar un préstamo, suelen tener un coste de mantenimiento anual, intereses muy altos y condiciones que solo llegas a conocer leyendo la letra pequeña.
De ahí, que sea tan importante hacer cuentas para ver si te compensa seguir utilizando la tarjeta de crédito o reorganizar tus finanzas para no pagar una cuantía extra por tus compras.
¿Existen comparadores de tarjetas de crédito?
Hoy en día, existen comparadores de casi todo. De seguros, hipotecas, móviles, coches e incluso entidades financieras. Y, cómo no podía ser de otro modo, también de tarjetas de crédito.
En Economipedia, en línea con la educación financiera, tenemos muy claro que la mejor forma de proceder a la hora de contratar cualquier cosa es informarse y comparar. Infórmate, aprende, revisa las ventajas y desventajas, y compara todas las alternativas posibles.
¿Cuántas veces te ha pasado que por contratar algo de prisa y corriendo, has visto que había una alternativa mejor y más barata? Seguro que unas cuantas. No permita que eso te vuelva pasar y adopta ese método. Puede que tardes un poco más, pero es más importante avanzar con paso firme que hacerlo sin rumbo.
Dicho esto, si aun así, tienes claro que necesitas una tarjeta de crédito, hay comparadores como Credexia que te facilitan la tarea de conocer las alternativas posibles. A partir de ahí, se trata de revisar la que más se adapte a ti. Pero, ¡cuidado! Las comisiones y los costes no lo son todo. Hay tarjetas de crédito que cobran menos intereses, pero tienen un coste de mantenimiento mayor. Y, al contrario, otras que no tienen coste de mantenimiento, pero tienen intereses mayores. Del mismo modo, hay casos de tarjetas de crédito que se anuncian con un 0% de interés, pero seguramente tengas un plazo más limitado (por ejemplo, devolver antes de 3 meses).
Este tipo de cosas y mucho más has de tenerlas en cuenta a la hora de contratar una tarjeta de crédito. Y mucho más importante aún, ¿realmente necesitas una tarjeta de crédito?