Acuerdo por unanimidad en la eterna reunión entre Europa y Grecia. Les ha llevado unas 19 horas de negociaciones pero, finalmente, ha habido consenso. ¿Europa y Grecia empiezan a entenderse o es debido a la necesidad? Aseguraría que lo segundo, Tsipras no tiene muchas otras opciones si quiere evitar el Grexit.
Nos despertábamos esta mañana con el tuit del presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, que servía para comunicar el acuerdo en la Eurocumbre por el que se activa el programa del Mecanismo de Estabilidad (MEDE) con serias reformas y asistencia financiera.
EuroSummit has unanimously reached agreement. All ready to go for ESM programme for #Greece with serious reforms & financial support
— Donald Tusk (@eucopresident) julio 13, 2015
No le ha quedado otra opción a Tsipras más que aceptar una serie de medidas que poco concuerdan con su programa, pero que se le va a hacer si la necesidad aprieta. Veremos que consecuencias tiene en el parlamento griego. El cierre de los bancos, más el corralito y unas arcas públicas necesitadas de dinero, le han llevado a comprometerse a implantar de manera inmediata una serie de medidas como la subida del IVA, ampliar la base imponible con el objeto de aumentar la recaudación de impuestos y reformar las pensiones. Medidas de carácter inmediato, tanto es así, que el plazo de límite de implantación es este próximo miércoles 15 de julio.
No son solo estas las medidas exigidas a Grecia. Contra su voluntad, Tsipras ha tenido que aceptar la participación del Fondo Monetario Internacional (FMI) en el tercer rescate y asumir la exigencia de agrupar activos griegos por valor de 50.000 millones de euros para transferirlos a un fondo en Luxemburgo, privatizarlos y reducir de esta manera su deuda. Serán gestionados por Grecia y supervisados por Europa y servirán de aval para el tercer rescate. Además, la reestructuración de la deuda pública queda pospuesta.
¿Cuánto dinero necesita Grecia?
Según el Eurogrupo, para el 20 de julio Grecia precisa de 7.000 millones de euros. Primera fecha límite, Atenas debe pagar 3.450 millones de euros al Banco Central Europeo (BCE), sino lo hace, dejaría de cumplir uno de los requisitos para el acceso de la banca griega al ELA (Provisión de Liquidez de Emergencia), por tanto, si el BCE le corta grifo, Grecia se abocaría a la salida del euro.
Para mediados de agosto, establecen que requieren unos 5.000 millones de euros más. A su vez, para recapitalizarse las entidades griegas necesitan entre 10.000 y 25.000 millones.
Estudiando todas las exigencias y necesidades de Grecia, valoran en unos 80.000 millones de euros la asistencia financiera.