Inversión socialmente responsable
La inversión socialmente responsable es aquella que toma en cuenta no solo el criterio de la rentabilidad, sino el impacto social y en el medioambiente.
Es decir, la inversión socialmente responsable no solo busca la generación de ganancias, sino tener una repercusión positiva en la sociedad y en la naturaleza.
En ese sentido, este tipo de inversión está involucrada con temas como la inclusión financiera, el apoyo a ciertos grupos o comunidades excluidas, el desarrollo sostenible, entre otros.
Asimismo, esta clase de inversión no es compatible con actividades que puedan tener un impacto social negativo, por ejemplo, la producción de sustancias que puedan generar adicción y daños a la salud (como el tabaco).
La inversión socialmente responsable está relacionada con la responsabilidad social corporativa. Este concepto se refiere al compromiso de la empresa de dirigir sus acciones a la contribución del mejoramiento social, económico y ambiental.
Cada vez son más empresas involucradas con este tipo de inversión, no solo organizaciones sin fines de lucro o entidades estatales. Esto es porque cada vez existe mayor conciencia sobre la importancia de la sostenibilidad ambiental y la inclusión social.
Características de la inversión socialmente responsable
Las principales características de la inversión socialmente responsable son:
- Busca no solo la generación de utilidades, sino una repercusión positiva en la sociedad y en el medioambiente.
- No es incompatible con la rentabilidad. La idea es que la inversión sea rentable y, al mismo tiempo, pueda atender otros criterios como el compromiso social y la sostenibilidad.
- No puede ser compatible con acciones que generen perjuicios como la contaminación o daños a la salud de las personas.
- Este tipo de inversión se puede efectuar a través de fondos de inversión socialmente responsables (ISR). Estas son entidades de inversión que seleccionan los activos de su portafolio de acuerdo con criterios ambientales, sociales, entre otras variables afines.
Ejemplo de inversión socialmente responsable
Un ejemplo de este tipo de inversión podría ser aquella que se realiza en una comunidad campesina que se dedica al cultivo de café con prácticas de sostenibilidad ambiental.
En este caso, no solo se buscaría apoyar a una comunidad rural, sino una actividad que busca proteger en lo posible al medioambiente. Además, es probable que el café cultivado tenga una demanda potencial en un público interesado por los temas de sostenibilidad y de justicia social.