Un índice de condiciones financieras es una fotografía semanal de la situación financiera de un país en los mercados monetarios, de deuda y acciones. En el caso de los Estados Unidos, la principal referencia en cuanto a condiciones financieras es el Chicago Fed’s National Financial Conditions Index (NFCI) de la Reserva Federal de Chicago.
Puesto que la situación financiera y económica tienden a correlacionarse en un grado muy elevado, también existe el índice ajustado o NFCI (ANFCI). Este segundo indicador aísla un componente de las condiciones financieras, no correlacionado con las condiciones económicas, para proporcionar una actualización de la situación financiera con relación a la situación económica.
Estos indicadores son muy seguidos para el trading en deuda o mercados monetarios. Se actualizan una vez por semana (cada miércoles) y cubren los cambios desde el viernes anterior. Si ese miércoles es festivo en EE.UU., el índice se actualiza el jueves.
¿Por qué un FCI?
Ahora que los tipos de interés están al alza en EE.UU. (tipos a corto), se crea una curva conocida como IS en el PIB del país norteamericano. La IS representa varias combinaciones de intereses y rentas junto con el mercado de bienes en equilibrio. Pero no es del todo eficaz, motivo por el que se ha creado este FCI o índice de Condiciones Financieras.
El FCI es una media ponderada de los tipos de interés sin riesgo, el tipo de cambio, las valoraciones de las acciones y los diferenciales de crédito que reflejan el impacto directo de cada una de estas variables en el Producto Interior Bruto (PIB).
Explicar para qué sirve es un tanto más complicado porque se trata de un índice complejo. De forma resumida, podemos decir que -por un lado- refleja la respuesta del PIB al FCI y, por otro lado, la respuesta del FCI a los tipos de interés oficiales. Así, los cambios en el FCI sirven para predecir cambios en el PIB real, lo que resulta muy interesante para poder tomar mejores decisiones de trading e inversión.
Más en concreto, los cambios en la política monetaria estadounidense se miden como cambios en la rentabilidad de los bonos públicos del Tesoro. Estos cambios se analizan en ventanas de una hora.
Por lo tanto, explican los expertos, la Fed puede influir en el FCI a través de los cambios en la política monetaria, incluso aunque no pueden controlar estas condiciones estableciendo una tendencia o camino para los tipos.
Aunque las condiciones financieras medidas por el FCI y su impacto en los mercados (inversión y trading) parecen complicadas de valorar, lo cierto es que estos indicadores permiten a los bancos centrales suavizar las condiciones financieras de un país en periodos en los que la inflación o las tasas de empleo están por debajo o por encima de los objetivos establecidos.
Los FCI permiten monitorizar la situación actual de los mercados financieros de un país y predecir su impacto a corto plazo en la economía real (indicador del PIB futuro) y, por ende, en los mercados y el trading.
Europa tiene también su MCI
La Unión Europea tiene un indicador similar al FCI estadounidense y lo denomina Monetary Conditions Index o índice de Condiciones Monetarias. Se puede definir de forma parecida, pues sería un índice generado por la combinación lineal de los tipos de interés a corto plazo y la tasa de cambio efectiva en relación con su valor en un periodo base.
Este indicador sirve para reflejar el impacto relativo de cada una de estas dos variables en el PIB tras dos años.
Además, grandes instituciones financieras estadounidenses han desarrollado sus equivalentes al FCI. Construidos de diferente manera y con variables distintas, estos otros FCI privados también pretenden adelantar el impacto de las condiciones financieras en los mercados porque afectan al trading.
La búsqueda de indicadores que permitan predecir el futuro
Los mercados tienden a buscar indicadores que les indiquen las tendencias y las expectativas en políticas monetarias, para valorar con toda la antelación posible su impacto en la economía. De ahí la lucha por tener el FCI más preciso, con el fin de obtener la información necesaria para tomar decisiones y para ayudar a los clientes a optimizar las suyas.
Como en otros muchos índices, la idea de los FCI es la de elaborar una herramienta que permita medir las condiciones financieras y su comportamiento futuro. Da igual que sea la Fed o una entidad financiera independiente.