Si te gusta el tema de las empresas tecnológicas y la inteligencia artificial, hoy te traigo salseo y del bueno.
Todos sabemos que Nvidia es la empresa más querida de chips para inteligencia artificial, pero dicho cariño podría disolverse de confirmarse los rumores de algo que están planeando hacer.
Algo huele a podrido en casa de tito Huang.
Según el inversor James Chanos, la posible compra de una startup llamada Lepton AI por parte de Nvidia podría ser lo que muestre que no todo es tan bonito y que se esté formando una bandera roja de manual.
Os lo cuento de forma muy clara.
¿Qué está pasando con Nvidia y Lepton AI?
Para poneros en contexto, Nvidia está en conversaciones avanzadas para comprar Lepton AI, una startup que alquila servidores con chips de Nvidia para ofrecer servicios de IA en la nube.
La noticia viene de un artículo de Bloomberg que compartió James Chanos en Twitter el pasado 26 de marzo de 2025, y dice que esta adquisición podría costar varios cientos de millones de dólares.
A primera vista, parece una jugada estratégica: Nvidia quiere meterse más en el mercado de la nube y el software empresarial, donde compite con gigantes como Amazon (AWS), Google (Google Cloud) y Microsoft (Azure).
Pero Chanos, que es un experto en detectar problemas financieros, dice que esto podría ser más que una simple compra. Según él, Nvidia podría estar intentando «enterrar» problemas financieros con esta estrategia.
¿Cómo? Vamos a desglosarlo.
¿Por qué la compra de Lepton es una «bandera roja»?
Como te decía, Nvidia es un gigante en el mercado de chips para IA, y sus mayores clientes son los grandes proveedores de servicios en la nube, como Amazon, Google y Microsoft.
Estas empresas están empezando a desarrollar sus propios chips de IA para reducir su dependencia de Nvidia, ya que sus chips son muy caros.
Esto representa una amenaza para Nvidia, porque si sus mayores clientes empiezan a usar chips alternativos más baratos, Nvidia podría perder cuota de mercado.
¿Y qué pinta aquí Lepton?
Lepton es una startup que alquila servidores con chips de Nvidia para ofrecer servicios de IA en la nube. Es decir, usa la tecnología de Nvidia para proporcionar servicios a otras empresas.
Si Nvidia la compra, fortalece su presencia en el mercado de la nube y en el software empresarial, un área donde compite directamente con Amazon, Google y Microsoft.
Sin embargo, Lepton AI no parece ser una empresa muy grande ni rentable. Según el post, genera unos 12.5 millones de dólares al mes (150 millones al año), pero tiene sólo 20 empleados y no parece estar generando muchas ganancias
Entonces, ¿por qué Nvidia querría comprar una empresa tan pequeña?
Chanos sugiere que no es solo por estrategia, sino porque Nvidia podría estar enfrentando problemas financieros y quiere usar esta compra para «maquillarlos».
Vamos a ver cómo.
Los problemas financieros que Nvidia podría estar escondiendo
Chanos menciona dos posibles problemas que Nvidia podría estar enfrentando:
- Exceso de inventario: Esto significa que Nvidia podría haber fabricado más chips de los que ha vendido.
En una empresa de tecnología, y más dedicada a IA, que el material se quede en el inventario es un problema, puesto que se queda obsoleto en poco tiempo.
Si los chips se acumulan en sus almacenes eso es un problemón para una empresa como Nvidia, porque significa que no están generando ingresos con ellos. Además, si no los venden, podrían tener que reportar pérdidas, y eso no le gusta nada a los inversores.
- Clientes que no pagan a tiempo: Nvidia podría haber vendido chips a clientes que no le han pagado todavía (o que podrían no pagar nunca).
Esto se llama «cuentas por cobrar», y si Nvidia no cobra ese dinero, también tiene que reportar pérdidas, lo que hace que sus números se vean mal.
Aquí es donde entra la compra de Lepton AI.
Chanos dice que Nvidia podría estar usando esta adquisición para «enterrar bajo la alfombra» estos problemas, es decir, para hacer que sus números se vean mejor de lo que realmente son.
Para verlo de forma clara, imagina que tienes una tienda de ropa.
Fabricaste 1.000 camisetas, pero solo has vendido 200. Eso significa que tienes 800 camisetas acumuladas en tu almacén (tu exceso de inventario).
Además, vendiste 100 camisetas a un cliente que no te ha pagado todavía (un problema de cuentas por cobrar).
Vamos, que estás en la mugre. No vendes y encima no te pagan.
Entonces, decides «solucionar» el problema de una manera un poco… creativa.
Abres una segunda tienda, y luego «vendes» las 800 camisetas de tu almacén a tu segunda tienda.
En tus libros contables, registras esa «venta» como ingresos, y parece que has reducido tu inventario y has ganado dinero. Pero en realidad, no has vendido esas camisetas a un cliente real, solo las has movido de una tienda a otra dentro de tu propio negocio.
Además de eso, usas el dinero de abrir la segunda tienda para «pagar» la deuda del cliente que no te había pagado. Esto hace que parezca que has cobrado el dinero que te debían, aunque no has recibido dinerito fresco de ningún cliente externo.
Ahora parece que has vendido 1.000 camisetas y que has cobrado todo lo que te debían.
Todo bien, ¿no?
Bueno, no. En realidad, no has resuelto nada: sigues sin vender camisetas a clientes reales, y no has recibido dinero nuevo. Solo has hecho un truco contable para que tus números se vean mejor.
¿Cómo puede aplicar esto Nvidia a Lepton AI?
Ahora, si reemplazamos tu tienda de camisetas por Lepton AI, si Nvidia compra Lepton AI, Lepton pasa a ser parte de Nvidia.
Entonces, Nvidia puede «vender» sus chips acumulados a Lepton y registrar esa «venta» como ingresos. En los libros contables, parece que Nvidia ha reducido su inventario, pero en realidad no ha vendido esos chips a un cliente real, solo los ha movido dentro de su propia empresa.
Nvidia podría usar el dinero de la adquisición (los cientos de millones que paga por Lepton) para «pagar» deudas que Lepton (u otros clientes) tienen con Nvidia.
Esto hace que parezca que Nvidia ha cobrado el dinero que le debían, aunque no ha recibido dinero fresco de un cliente externo.
¿Por qué esto es una bandera roja?
El hecho de que Nvidia esté recurriendo a este tipo de estrategias podría ser una señal de que no está en una posición tan sólida como parece.
Normalmente, las empresas hacen este tipo de movimientos cuando tienen dificultades para vender sus productos o cuando no hay tanta demanda como parece.
En el caso de Nvidia, esto podría significar que la demanda de sus chips no es tan alta como nos han hecho creer, o que podrían estar enfrentándose problemas financieros más serios de los que están admitiendo públicamente.
Si los analistas e inversores empiezan a olerse que algo no va bien, esto podría hacer que el precio de las acciones de Nvidia caiga, y no poco.
Por ahora, esto es solo una sospecha de James Chanos, pero es una advertencia que no podemos pasar inadvertida, puesto que es un gran analista y no parece que se haya desmentido.
Por tanto, aunque no sabemos si esto es 100% cierto, es un dato que debemos tener en cuenta.
Lo iremos viendo en las próximas semanas.
Espero que te haya gustado.
Buena inversión.