Prescindir de la ayuda económica de la familia para independizarse, parece un reto insuperable para los jóvenes españoles menores de 30 años. Las condiciones laborales existentes en España y los precios tan altos de las viviendas, tanto para alquilar como para comprar, retrasan la nueva etapa de la emancipación juvenil.
La grave crisis económica por la que acaba de pasar España es uno de los principales motivos. Los jóvenes han sido los más afectados, pues a pesar de la recuperación económica, la tasa de desempleo juvenil sigue al rededor del 50%. La situación no es más favorable para aquellos jóvenes que tienen la suerte de poder de decir que están trabajando, puesto que cuentan con contratos precarios, trabajando numerosas horas y con un salario mínimo, que en ocasiones no llega alcanzar los 600 euros al mes. Este riesgo amenaza con situar a los jóvenes españoles al borde del umbral de la pobreza. Además, el mercado laboral actual en España no ofrece seguridad ni estabilidad que puedan garantizar el futuro profesional.
¿Por qué no pueden independizarse los jóvenes?
Por otro lado, si afrontar el alquiler de una vivienda supone un gran esfuerzo económico, la compra de una vivienda es algo inviable en la actualidad para muchos jóvenes, que aunque estén trabajando, su salario no les permite comprar su propia casa. Así pues, es otro de los motivos que dificulta la salida del hogar de muchos jóvenes españoles menores de 30 años que necesitarían cobrar un 95 % más de su salario para plantearse la opción de comprar o alquilar. También están aquellos jóvenes que trabajan y que pueden permitirse vivir en un piso de alquiler si comparten con otros compañeros, puesto que si deciden alquilar o comprar en estos momentos, supondría destinar cerca de un 60% de su sueldo. Por el contrario, si destinan menos del 30% de sus salarios a comprar o alquilar una casa (que es el porcentaje recomendable o capacidad de endeudamiento), únicamente podrían permitirse alquilar pisos de menos de 40 metros cuadrados o comprar una propiedad de menos de 50 metros cuadrados.
Con este panorama, en el cual 8 de cada 10 jóvenes menores de 30 años continúan viviendo con sus padres, según indica el Consejo de la Juventud de España, deberían existir medidas que favorecieran el crecimiento tanto personal como profesional.
¿Qué tipo de medidas podrían favorecer la emancipación juvenil?
- Los programas de ayudas al alquiler, por parte del Gobierno, para que brinden la oportunidad a los jóvenes de poder optar a un alquiler digno.
- Planes de formación e inserción laboral de los jóvenes al mercado laboral español.
- Modificaciones de los contratos actuales, con más beneficios sociales y sin salarios precarios que permitan a los jóvenes vivir con dignidad y sin que lleguen a rozar el umbral de la pobreza con menos de 30 años.
- Mayor facilidad para crear empresas, que en España la situación sigue siendo ridícula comparada con países del entorno como Reino Unido.