Bien no fungible
Un bien no fungible es aquel bien mueble o inmueble que no puede ser sustituido por otro, es decir, no existe un equivalente de su misma especie y calidad.
En otras palabras, un bien no fungible es aquel que no puede reemplazarse por otro, siendo único en su tipo. Es lo opuesto a un bien fungible.
Un ejemplo clásico de bien no fungible es una obra de arte. Esta puede ser replicada o copiada. Sin embargo, la obra original es irrepetible.
Características de los bienes no fungibles
Entre las características de los bienes no fungibles podemos destacar:
- Puede tratarse de un bien mueble o inmueble.
- Puede ser consumido sin perder su característica de irrepetible. Supongamos un monumento histórico que es visitado (consumido) por muchas personas. Esto no significa que va a dejar de ser valorado como único.
- El artículo 337 del Código Civil de España lo define de la siguiente manera: “Los bienes muebles son fungibles o no fungibles. A la primera especie pertenecen aquellos de que no puede hacerse el uso adecuado a su naturaleza sin que se consuman; a la segunda especie corresponden los demás”.
- No se agota con su uso, a diferencia de un bien fungible, como el dinero. Un billete de 20 euros se utiliza, por ejemplo, para efectuar una compra en el supermercado, y ya está gastado. Es decir, una vez usado, quien lo poseía originalmente ya no lo puede volver a utilizar. Esto no sucede con los bienes no fungibles. Imagina el caso de una pieza de orfebrería de valor histórico exhibida en un museo. Aunque muchas personas visiten el lugar para ver o consumir el objeto, este no se agota.
- Las empresas que fabrican bienes no fungibles suelen competir por ofrecer mayor calidad. Pensemos en el caso de un automóvil de lujo, al que, a pedido del cliente, se le añadieron complementos únicos, con tecnología de punta.
- La indemnización o reparación del daño por la pérdida de un bien no fungible es posible solo con dinero.
Ejemplos de bienes no fungibles
Algunos ejemplos de bienes no fungibles pueden ser:
- Objetos buscados por los coleccionistas, como postales o monedas antiguas.
- Obras de arte únicas.
- Una prenda hecha a medida del comprador.
- Un edificio o inmueble con un diseño único, como las construcciones del famoso arquitecto Antoni Gaudí ubicadas en Barcelona.
- Restos arqueológicos, como el Partenón de Atenas, que son considerados patrimonio de la humanidad.