La crisis del Coronavirus ha provocado registros que no se veían desde hace muchas décadas. La volatilidad ha sido extraordinariamente elevada y el sector financiero se ha visto fuertemente sacudido.
El tsunami vivido en las bolsas llevó a que las bolsas de todo el mundo cayeran en picado. Afectando especialmente a algunas de ellas como es el caso del IBEX 35 que cerró con la mayor caída de su historia en el mes de marzo tras dejarse un 22,21%. Una cifra, todo sea dicho, únicamente comparable con el mes de agosto de 1998, cuando el IBEX 35 cerró con una caída del 21,24%

No obstante, durante el mes de abril muchas bolsas dejaron de caer e incluso se recuperaron. Un efecto que se ha visto reducido en aquellos países más afectados por la enfermedad y las medidas de confinamiento.
Aunque en bolsa la incertidumbre es algo habitual y no podemos predecir el futuro, las principales bolsas de Europa y Estados Unidos podrían estar mostrando los primeros síntomas de recuperación. De hecho, Torsten Slok, economista jefe de Deutsche Bank Securities, ha diseñado un gráfico, que combina las infecciones de la epidemia del Covid-19 por tasa de crecimiento y uno de los indicadores de volatilidad más seguidos de Wall Street, con el que señala que las medidas de la crisis sanitaria y la volatilidad del mercado pueden haber alcanzado su punto máximo.

Oleada de clientes hacia los brókeres
A pesar de que la incertidumbre es muy grande, los niveles de volatilidad siguen elevados y la crisis económica amenizada con afectar muy fuerte a los hogares, han sido muchos los pequeños inversores interesados en abrir cuenta en un bróker.
De hecho, muchos de ellos han tenido incluso que establecer listas de espera ante la gran demanda para abrir una cuenta que les permitiría operar. Relacionado con ello, también se ha vivido un auge increíble en el número de ofertas de cursos de bolsa, con mensajes especialmente engañosos afirmando que la bolsa es algo fácil y que se puede ganar un dinerito extra.
Con el dinero no se juega y menos con el trabajo que todos sabemos que cuesta conseguir. En la bolsa, por tanto, no se juega, se invierte. No se apuesta, se compra y se vende. Si las decisiones son acertadas ganaremos dinero y si son equivocadas perderemos dinero. Claro que para ello es esencial tener un bróker que nos ofrezca garantías y que como mínimo esté regulado por una autoridad competente. Cree una cuenta en VIVO.
¿Cómo saber si un bróker es una estafa?
Dada la amplísima variedad de brókeres online que ofrecen sus servicios, se torna esencial conocer cómo podemos diferenciar un bróker regulado de uno que no lo es. Aunque los factores para elegir un bróker en lugar de otro son muy variados (comisiones, spreads, depósito mínimo, tipos de activos financieros, atención al cliente…) el más importante es que se encuentre debidamente regulado y nuestro dinero esté seguro. En este sentido, hay muchos de ellos que tienen licencia y están autorizados por la Comisión de Bolsa y Valores de Chipre (CySEC). Un ejemplo de bróker con licencia allí podría ser ETFinance, patrocinador del Real Madrid de Baloncesto.
Eso sí, que un bróker tenga licencia y esté regulado no es suficiente para tener todas las garantías de nuestro lado. Cada Comisión de Bolsa tiene unas garantías diferentes. Por ejemplo, los fondos garantizados no son los mismos en un bróker regulado por la CNMV que en la CySEC o en la FCA.
Productos y plataformas para operar
Muchos brókeres tienen plataformas como MetaTrader4 a través de las que ofrecen sus activos financieros. En general, todo sea indicado, suelen centrar su oferta en CFDs. Los CFDs permiten un mayor acceso a los pequeños inversores ya que permiten operar con capitales más reducidos.
La desventaja es que los CFDs son un mercado OTC, es decir, no regulado. Lo cual, no quiere decir que sea ilegal, todo lo contrario. Los CFDs son perfectamente legales y su funcionamiento es muy parecido a de los futuros financieros, pero el mercado no está regulado y estandarizado, y no hay una cámara de compensación. Aun así, como ya hemos dicho, para muchos pequeños inversores sería imposible acceder a determinados mercados si no fuera por los CFDs.
Con respecto a las plataformas, aunque no es algo especialmente relevante, sí es interesante que los brókeres ofrezcan plataformas sencillas e intuitivas. Sobre todo, al principio. Para ello será suficiente con abrir una cuenta demo (disponible en muchos de ellos) para que podamos ir comprobando como funciona la operativa en los mercados financieros.
En cualquier caso, como siempre, lo más importante es estudiar, formarse, aprender los conceptos más importantes para poder tener una visión crítica. Una visión crítica que nos aleje de las falsas creencias de que seremos ricos en unos meses. En la bolsa se puede ganar dinero y si se hace bien, se gana dinero. Pero eso no quiere decir que sea fácil y que con pocas horas dedicación vayamos a alcanzar la excelencia que prometen algunos. Por último, de nuevo respecto a los brókeres, la regulación es lo más importante, ya que el resto dependerá de las necesidades de cada inversor. Hay brókeres más caros que son elegidos por inversores que prefieren plataformas más sencillas e intuitivas, por tanto, la elección última dependerá de cada cual.