Para aquellos pequeños inversores que viajen a través de la red en busca de nuevos mercados interesantes en los que poner su dinero, hay una rama quizá desconocida a la par que entretenida que puede llegar a cambiar toda una vida.
Los juegos de azar siempre plantean un gran reto al usuario puesto que no sabes con exactitud lo que va a pasar en ellos, pero los juegos que mezclan fortuna con habilidad como el póker son muy diferentes. En ellos interviene toda una estrategia y preparación previa que no pueden tener jugadores de otra clase de disciplinas. Pues en esto también se puede invertir.
El póker es un juego que reúne las condiciones para ser considerado como muy feroz, pues el triunfo de unos supone la derrota de otros. Es el mejor ejemplo de esos juegos denominados como de suma cero y que provocan que la competitividad sea gigantesca.
Y es por eso que los jugadores se valen de varios factores para entrar a los mejores torneos del mundo y llegar lo más lejos posible en ellos. Una de las cosas a destacar es el poder para encontrar a personas que quieran invertir en ellos y que les ayuden a pagar su entrada en un campeonato. Y del resultado, el inversor se lleva un porcentaje de ganancias.
Obviamente no hablamos de cualquier tipo de juegos. Lo fundamental para poder acumular más beneficios es colocar el dinero en jugadores que alcancen torneos con las mejores cantidades disponibles. Y eso indudablemente nos lleva a los campeonatos con las reglas Texas Holdem. Porque precisamente los grandes circuitos se desarrollan en esta variante, la más popular en el mundo del póker a día de hoy. Las WSOP son las más populares en todo el mundo y los circuitos circuito WPT y EPT tampoco se quedan atrás. En todos ellos su Main Event se juega en Texas Holdem.
El caso es que los acuerdos para este tipo de competiciones son más habituales de los que imaginamos. Hay casos de grandes ganadores que han tenido que pagar gran parte de su premio a inversores, que previamente les habían ayudado a pagar la entrada a un torneo. En realidad esta es la parte desconocida para los usuarios que quieren comenzar a jugar al póker.
Comprar, vender e intercambiar
En España, la Dirección General de Ordenación del Juego presenta el póker en su informe más reciente como el tercer juego con más usuarios activos en internet. En total 443.000 jugadores, menos que apuestas deportivas y juegos de casino, pero más que el bingo, por ejemplo. Y lo que detecta el organismo regulador de esta industria es que el perfil de jugador tipo cada vez se rejuvenece más. Eso nos lleva a que invertir en jóvenes talentos es una buena respuesta, si bien no son el valor más seguro para cualquier inversor.
Y es que como en cualquier otro mercado hay que correr unos riesgos a la hora de realizar una inversión económica. Y también como en cualquier otra disciplina, el inversor estará obligado a rastrear varios perfiles hasta encontrar aquel que le aporte la suficiente seguridad como para confiarle su dinero. Ahí son los jugadores más experimentados y con más tablas los que tienen la respuesta. El estadounidense Greg Raymer es uno de los ejemplos más destacados, llegando a ganar el evento principal de la WSOP en 2004 con un premio de 5 millones de dólares de los que 2 millones fueron a parar a sus inversores.
El canadiense Daniel Negreanu, considerado como uno de los mejores jugadores del siglo XXI, tuvo que dar algo más del 10% de su premio de casi 8,3 millones de dólares de un torneo en 2014. La mayoría de los participantes que confiaron en el de Toronto ganaron 8 veces más de lo que habían invertido en un principio.
Pero los porcentajes llegan a ser mucho más grandes. Hay jugadores que venden un 50% o hasta un 70% de participaciones para su ingreso a un torneo. De esa manera solo tienen que pagar una pequeña parte de la entrada a un torneo, que por lo general suelen ser bastante caras.
Por el contrario también tienen que entregar parte de sus ganancias, siempre y cuando las consigan. ¿Qué ocurre si son eliminados a las primeras de cambio? El jugador tendrá que compensar en los siguientes torneos hasta poder devolver lo invertido a cada usuario que haya confiado en él. A menos que el contrato estipule otra cosa, porque hay casos en los que se firma un acuerdo a largo plazo en un papel por escrito en el que se dan detalles específicos sobre estas cuestiones.
De hecho, hay jugadores que deciden invertir en otros cuando no consiguen por sus propios medios llegar a la etapa principal de un gran torneo. De esa forma pueden vivir de alguna manera la emoción del juego y animan a su pupilo en la distancia.
Pero lo más curioso es que hay jugadores que se intercambian las inversiones. Incluso entre usuarios que estén disputando un mismo torneo, se compran y venden unos a otros participaciones para poder batallar juntos y beneficiarse los unos de los otros.
En la red hay dos lugares principales a los que acudir para invertir en jugadores de póker. YouStake funciona como una especie de foro en la que jugadores e inversores pueden conocerse previamente y dar buena cuenta de las características de cada uno. Por su parte, 2+2 es algo más profesional con contratos disponibles para firmar por ambas partes y oficializar el acuerdo.