¿Sabes cómo preparar una entrevista de trabajo para conseguir el puesto que estás buscando? Ponte cómodo y presta atención porque una vez que leas esta guía tus probabilidades de éxito se van a multiplicar.
Antes de nada, tienes que tener claro que lo más importante es estar tranquilo para poder comunicar bien todo aquello que sabes hacer. Junto a esto, en una entrevista es muy importante la presencia, ya que es inevitable que el entrevistador se fije en la primera imagen que ve de ti.
Por ello, viste de forma elegante pero sin pasarte, pocos sitios piden que vayas vestido como para una boda. Tu ropa tiene que ser agradable y mostrar cercanía para que el entrevistador empatice contigo. En ocasiones, una vestimenta excesivamente elegante o casual puede generar barreras (salvo que la entrevista lo requiera).
También es muy importante que llegues con tiempo al lugar de la entrevista si es presencial, para evitar agobios. Una vez en el lugar que vas a hacer la entrevista ya sea presencial o telemática, deja el móvil de lado durante una hora antes.
Durante este período previo, trata de caminar un rato y reflexionar acerca de cómo vas a afrontar la entrevista. Para ganar seguridad, repite mentalmente todas aquellas cualidades que quieres destacar de ti. Esto te servirá para relajarte y estar 100% concentrado para no cometer errores.
Ahora bien, ¿sabes exactamente qué es una entrevista?
Una entrevista de trabajo es una comunicación formalizada por medio del lenguaje, generalmente entre dos personas (entrevistado y entrevistador). En este encuentro se produce un intercambio de información con el fin de evaluar la idoneidad de un candidato para un determinado puesto de trabajo. Esta puede ser presencial, telefónica u online a través de videoconferencia.
En esta guía te vamos enseñar los tipos de entrevistas que hay y qué se pretende evaluar con cada una de ellas. El objetivo es que seas capaz de empatizar con el entrevistador y dar con las claves que busca.
1. Tipos de entrevistas de trabajo
Te voy a ser sincera, no hay una receta mágica para estar preparado ante cualquier circunstancia que te puedas encontrar en una entrevista de trabajo. Por eso, te presentamos los distintos tipos hay para que la prepares de la mejor forma posible:
Entrevista telefónica
Se suele utilizar en la fase de preselección para limitar la cantidad de solicitantes y quedarse con los que cumplen un mínimo de requisitos para la siguiente entrevista formal.
Entrevista tradicional
Suelen ser presenciales y contener cuestiones previsibles, lo que permite a los solicitantes prepararse las respuestas de antemano.
Entrevistas de presión
Suele utilizarse en puestos exigentes y donde se puedan vivir situaciones de estrés, presión, críticas o poco habituales donde se requiere tomar decisiones cruciales y de manera rápida. Por ejemplo, para policías, controladores aéreos o militares.
Entrevistas grupales
Son aquellas donde hay varios entrevistadores que pertenecen al departamento o división donde va a trabajar el candidato. Se pueden reunir con el candidato todos juntos o de manera individual.
Entrevistas de situación
Son aquellas donde se pone al candidato en situaciones comprometidas similares a las que pueda vivir en su trabajo y realizar preguntas hipotéticas. Se intenta averiguar cómo actuaría el candidato ante una situación determinada, ver los valores, creatividad y experiencia del candidato.
Entrevistas de exploración de la conducta
Son aquellas que se centran en evaluar la conducta y competencias transversales de un candidato. Es decir, no los conocimientos técnicos y experiencia profesional, sino la forma que tiene de actuar: si tiende a liderar un equipo, si es resolutivo o si es flexible adaptándose al cambio, por ejemplo.
Vídeo entrevista
Con el uso de las nuevas tecnologías y los nuevos tiempos, cada vez es más habitual realizar una entrevista de trabajo por videoconferencia.
De esta forma, ahorra desplazamientos a los candidatos y les da la oportunidad de acceder a puestos en otro lugar diferente al de su residencia habitual. Hay numerosos programas informáticos que hacen posible esta conexión: Gmail, Skype, Zoom o Teams son algunos ejemplos. La estructura y contenido es igual que una presencial, únicamente cambia el medio.
2. Estructura de una entrevista de trabajo
Durante la entrevista, tendrás que dar lo mejor de ti en cada una de las etapas que la componen. El entrevistador en todo momento estará intentando recopilar información para saber si eres la persona idónea para cubrir ese puesto.
Para que estés tranquilo durante el proceso, te detallamos una a una todas las fases de una entrevista de trabajo. Así, seguro que irás más preparado y tranquilo, por lo que estarás un paso más cerca del éxito.
Pre-entrevista
Como candidato debes investigar la empresa y el puesto para el que estás aplicando, reflexionar sobre lo que buscan y lo que tú puedes aportar al puesto, como persona y como profesional, así como, cuáles son tus objetivos consiguiendo este trabajo. A partir de estas cuestiones básicas, prepara las respuestas que puedes dar para no quedarte en blanco ante el entrevistador.
Si consigues conocer a la perfección las líneas de negocio de la empresa, su situación en el mercado y las necesidades que tiene que cubrir, solo tendrás que comentarlo en la reunión y explicar cómo vas a actuar para conseguir que la empresa crezca y funcione mejor.
Como empresa, debes analizar detenidamente los CV de los candidatos a entrevistar y construir un guion con las particularidades de cada uno, de los puntos donde queremos obtener más información de ellos y qué es relevante para el puesto.
Apertura de la entrevista
En este momento ambas partes debéis de presentaros, dando vuestro nombre y especificando el puesto que ocupa en la empresa el entrevistador.
Crear un clima distendido y fiable, os corresponde a los dos, tenéis que poder expresaros con libertad y sinceridad. Toma la iniciativa y muestra cercanía con tu entrevistador o entrevistado, esto facilitará el flujo de información.
Las primeras preguntas suelen ser generales durante un periodo breve de tiempo para romper el hielo, como por ejemplo, cuéntanos un poco tu trayectoria académica y profesional o de dónde vienes, por ejemplo.
Al comienzo, es recomendable que el entrevistador ofrezca información detallada sobre el puesto de trabajo. De manera que el candidato ya se hace una idea más concreta de las funciones a realizar y de lo que busca la empresa. A veces, este punto se puede dejar para el final de la entrevista, una vez se han hecho todas las preguntas al candidato.
Desarrollo
Se mantiene un esquema de preguntas comunes a todos los candidatos para hacer una evaluación comparativa posterior de todos ellos.
A medida que se va desarrollando la entrevista con cada candidato, pueden surgir preguntas concretas para cada uno de ellos en función de la información que van facilitando. De esta forma, cada entrevista es única.
Es importante mantener una escucha activa por ambas partes. Es decir, escuchar lo que está diciendo la persona que tienes enfrente e interiorizar esa información para seguir con el hilo de la comunicación.
Tolerar el silencio y no interrumpirse cuando cada una de las partes está hablando, son normas básicas que se debes cumplir para crear un clima agradable y hacer que la conversación fluya adecuadamente.
Durante la entrevista de trabajo es aconsejable que no hagas preguntas negativas, ofensivas o provocar situaciones embarazosas e incomodas para cada una de las partes.
El lenguaje corporal es un punto muy importante durante toda la entrevista y que el evaluador va a tener en cuenta si detecta incoherencias o nerviosismo ante alguna situación concreta.
Cierre
Dejar la oportunidad al candidato de hacer todas las preguntas que considere oportunas en relación al puesto y a la empresa. Es la ocasión que tiene el candidato de mostrar el interés que tiene y lo detallista que es.
Es importante preguntar cosas y no quedarse callado llegados a este punto, al fin y al cabo, es a lo que vas a dedicar tu vida profesional y debes mostrar un mínimo de interés y de querer saber más.
El entrevistador debe informar al candidato de los próximos pasos en el proceso de selección y sino es así, que sea el candidato quien pregunte sobre este punto.
Ser amable y despedirse cordialmente.
Post-entrevista
Los entrevistadores tomarán nota durante la entrevista, pero la evaluación final la harán una vez acabada. Es aconsejable no tomar demasiadas notas durante las explicaciones del candidato, pues sino hay contacto visual, se pierde información. Además, al candidato le puede incomodar el ver al entrevistador escribiendo demasiado en vez de estar atento a la conversación y hacerla más fluida.
Es aconsejable que el candidato envíe un email al día siguiente o a los 2-3 días de agradecimiento por el tiempo y la oportunidad de conocerse. De esta manera, continúas mostrando interés y recordándoles de manera indirecta que sigues ahí y estás esperando su respuesta.
3. Contenido que se evalúa en una entrevista de trabajo
¿Qué es lo que realmente interesa a los entrevistadores? ¿Qué están analizando? Si tenemos en cuenta lo que están buscando, es más fácil preparar qué es lo que queremos mostrar de nuestro conocimiento, experiencia y habilidades para poder contarlo de manera más fluida que de manera improvisada.
Vida académica y laboral del candidato
Se analiza desde sus estudios académicos y complementarios, hasta las funciones del último puesto donde ha trabajado.
Conocimientos y habilidades
Es importante conocer qué conocimientos, además de los estrictamente académicos, tiene cada candidato, como por ejemplo, idiomas, programas informáticos que maneja u otros trabajos que haya realizado.
Aficiones y otros intereses
Es habitual analizar los hobbies de cada candidato, que hace con su tiempo libre, si practica deporte, escribe en un blog… todo esto nos puede dar información acerca de su personalidad y de habilidades transversales que pueda tener.
Motivación
Se harán preguntas sobre los objetivos a corto y medio plazo que tiene el candidato, así como, su motivación para trabajar en este puesto y empresa. De esta manera, el entrevistador se hará a la idea de las expectativas del candidato y de si lo que ofrece este puesto realmente las va a cumplir o se va a frustrar o decepcionar.
Explicación del puesto y la empresa
El entrevistador dará una explicación del puesto en el que va a trabajar, quienes serán sus compañeros, sus jefes, sus funciones y cómo es la empresa para la que trabaja. Así como, el salario, condiciones laborales, los horarios y costumbres más destacables que pueda tener.