Pragmatismo

El pragmatismo es una corriente filosófica que establece que la utilidad del conocimiento y de las cosas se refleja en su aplicación práctica.

Esta corriente surge en el siglo XIX en Estados Unidos, y su primer y principal exponente fue Charles Sanders Pierce. Aunque le iban a seguir, también como figuras referentes, William James y John Dewey.

Para el pragmatismo no es suficiente con los conocimientos teóricos. Tampoco cree que el uso de la razón sea la herramienta necesaria en la obtención del conocimiento y la verdad de las cosas. Característica del racionalismo de Descartes.

¿Qué es ser pragmático?

Una persona pragmática, atendiendo al fundamento de la corriente filosófica, es una persona que se centra en la consecución de sus objetivos más que en la forma y manera de abordarlos.

Es decir, pone especial atención a las consecuencias de sus acciones, y si ellas le van a conducir hacia su verdadero objetivo.

Pragmatismo político

El pragmatismo político es una forma de entender y comprender que la política no ha de adherirse a ideologías y categorías vacías que puedan entorpecer la consecución de objetivos.

Así, un partido o gobernante, aunque como todas las fuerzas políticas defenderá unos valores, lo que realmente persigue es el establecimiento de unas políticas u otras en función de su utilidad, y no tanto de su significado teórico.

Esta es una forma de pensamiento que suelen escoger los partidos ligados al centro en el espectro político. El porqué lo encontramos en la ambigüedad que define al centro político. Puede ser usado para realizar todo tipo de políticas (dentro de unos parámetros) sin importar la ideología.

Lo mismo ocurre con los pactos y a la hora de buscar apoyos parlamentarios. Pero el pragmatismo nos puede penalizar en contextos de polarización social. Si el electorado, por cualquier razón, se encuentra más vinculado a las opciones situadas más en los extremos del espectro político, verán enormemente reducido su rédito electoral.

Por otro lado, resaltar que el pragmatismo, como todo en política, es un arma de doble filo. Si las intenciones de los gobernantes es mejorar la vida de los ciudadanos de un determinado territorio, estos se alejarán de sus programas originales si es necesario para la consecución de dicho fin. Pero si el dirigente lo que busca es el enriquecimiento personal y satisfacer sus propias ambiciones, todos los pasos que dé y las medidas que adopte irán destinadas a conseguir sus intereses.

Ejemplos de pragmatismo

A continuación se muestran algunos ejemplos de pragmatismo:

  • Imagina una persona que no se lleva bien con otra. Sin embargo, tienen un negocio en común. Una persona pragmática, dejaría a un lado las emociones e iría a conseguir el objetivo de que la empresa funcione. Es decir, sería pragmático.
  • Otro ejemplo de pragmatismo podría darse en política cuando se vota una determinada política. El partido A no está de acuerdo con el partido B en determinadas cuestiones. Sin embargo, el partido A, interpreta que esas cuestiones son de importancia menor y llega a un acuerdo de gobierno. Esto, ya que considera que el país necesita un gobierno que acometa reformas. En este caso, el partido A está siendo pragmático.

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Alfredo Marín García , 09 de febrero, 2021
Pragmatismo. Economipedia.com