La banca abierta proporciona a los clientes más control sobre sus datos financieros al permitirle compartirlos con proveedores externos que pueden ofrecer servicios nuevos y creativos.
La industria bancaria se ha transformado gracias al open banking y la conectividad API. Y es que el avance de estas tecnologías ha permitido a las instituciones ampliar sus ofertas y, al mismo tiempo, dar a los clientes más control sobre sus finanzas.
Las API están cambiando el panorama financiero
La integración a través de API (del inglés, Application Programming Interface) es el proceso de vincular varios sistemas de software para permitir que se conecten entre sí y se puedan compartir datos de una manera segura y eficiente.
La integración de API en la banca consigue que diferentes organizaciones puedan acceder a los datos de los consumidores (una vez otorgado el permiso por su parte) y así, resulte más fácil ofrecer productos innovadores.
Para hacer un seguimiento de cómo ha cambiado la situación de las APIs financieras, la consultora McKinsey realizó una encuesta a los ejecutivos de IT de los principales bancos globales.
Su análisis explora cómo los bancos están construyendo sus códigos API teniendo en cuenta la estrategia, los modelos operativos, la tecnología y las necesidades reales de las personas.
Además, el 81% mantiene que las API son una prioridad para sus entidades y que están asignando alrededor del 14% de su presupuesto a ellas.
Las API de open banking hacen posible el BaaS
A pesar de contar con más de una década de historia, el Banking as a Service está llegando a las masas gracias a estas interfaces de programación de aplicaciones.
El BaaS es un conjunto de soluciones E2E (del inglés, end to end) para minoristas, pequeñas y medianas empresas y banca corporativa, que se consumen a través de interfaces técnicas como API.
Las soluciones BaaS tienen dos objetivos:
Permiten a las empresas (sin licencia bancaria) integrar productos y servicios financieros en sus propuestas de valor para ofrecer, por ejemplo, cuentas corrientes, pagos digitales o préstamos.
Brindan a los bancos acceso a nuevos canales de venta mientras aceleran su transformación digital. Esto significa posicionarse como líderes en innovación dentro de un mercado altamente competitivo.
Una situación beneficiosa para todos los implicados
Todos los participantes, incluidos consumidores, empresas de terceros y proveedores de servicios financieros (bancos y fintech) se benefician de la existencia de APIs.
Para los clientes, proporcionan una forma más cómoda de acceder a productos bancarios en cualquier momento y lugar. Les permite pagar, prestar, ahorrar e invertir en los mismos lugares (a través de internet) donde compran comida o ropa, venden bienes y servicios o interactúan con amigos.
A las empresas les permite disfrutar de una mayor conversión y aumenta los ingresos (por ejemplo, a través del BNPL o Buy Now Pay Later), les proporciona nuevas fuentes de ingresos (ofreciendo financiación en el punto de venta) y aumenta la retención de clientes (con programas de fidelización).
También se benefician de nuevas fuentes de ingresos, mejores relaciones con los usuarios y un mayor valor a largo plazo del cliente.
Las ventajas competitivas del uso de APIs financieras
Para los bancos y fintechs, las APIs pueden aumentar el acceso a nuevos canales de ventas y nuevos tipos de consumidores, desbloqueando así grandes beneficios.
El Banking as a Service también presenta una importante oportunidad de crecimiento y ventajas estratégicas para los bancos tradicionales en cuatro aspectos:
- Ingresos y rentabilidad. Para los bancos tradicionales supone un aumento de los ingresos y la rentabilidad de dos maneras. En primer lugar, poder ofrecer soluciones integradas a grandes empresas tecnológicas y otros actores no financieros les da acceso a un mercado en auge. En segundo lugar, esto les permite acceder a los clientes de sus socios, lo que genera mayores tasas de conversión y menores costes de adquisición.
- Puntos de contacto con el cliente. Las APIs crean novedosas y diferentes oportunidades para interactuar diariamente con los usuarios de manera no intrusiva, a través de las plataformas de socios. Además, con el acceso a las transacciones bancarias de los usuarios aumenta el conocimiento profundo sobre el comportamiento del consumidor.
- Cartera de productos. Los conocimientos derivados de estos datos pueden servir como base para mejorar los productos financieros existentes, desarrollar otros nuevos o renovar toda la cartera de servicios de un banco (siempre en función de las necesidades detectadas).
- Transformación digital. Más allá de los beneficios de productos, clientes e ingresos descritos, acelerar lo digital es otra ventaja estratégica para los bancos. Por ejemplo, reemplazar sus infraestructuras de IT heredadas por otras mejores, más eficientes y flexibles permite a los bancos regenerar sus estructuras y mejorar procesos y operaciones.