Con el avance de las tecnologías de la información, la digitalización y la globalización, es posible que no solo trabajadores independientes, sino también aquellos contratados por una empresa, puedan desempeñar sus labores desde sus casas, con su ordenador.
Sin embargo, aunque muchas personas puedan pensar que trabajar desde casa es lo ideal, es una situación muchas veces romantizada por los medios y las redes sociales.
Cuando se hace alusión al trabajo remoto o al teletrabajo, la imagen que se nos viene a la mente es la de una persona en pijama sentada con un ordenador portátil frente a una playa en un lugar exótico, pero ¿es esta figura realista?
La evidencia nos indica que no. En tiempos de pandemia, debido al coronavirus, el teletrabajo desde casa se volvió más común y, en consecuencia, muchos trabajadores comenzaron a darse cuenta de que no es fácil ser productivo, por ejemplo, cuando un hijo o una mascota te distrae o interrumpe la videollamada con tu jefe.
A continuación, presentaremos algunas ventajas y desventajas de trabajar en casa.
Ventajas de trabajar de casa
Trabajar en casa presenta una serie de ventajas que podrían beneficiarnos.
Entre estas, destacan las siguientes:
- Evitar el tráfico: Esto es importante, sobre todo, en ciudades donde la movilidad es un problema.
- Menores costes: Al no tener que movilizarse a la oficina, y no tener que pagar por su comida fuera de casa, pues la persona, en principio, tendría una parte de los ingresos que no consume.
- Flexibilidad en los horarios: Habitualmente, el trabajo en casa permite a cada persona organizar su agenda. Sin embargo, hay trabajos que sí obligan al empleado a estar conectado a sus labores en un determinado rango de horas.
- El trabajador puede tener más tiempo para la familia: Por ejemplo, reuniéndose a la hora de la comida.
- Más tiempo libre: La persona puede organizarse de tal manera que tenga un tiempo libre para dedicar a actividades recreativas.
- No hay que cumplir con una determinada indumentaria: No es necesario seguir protocolos rígidos de vestimenta (lo cual implica un ahorro en ropa).
- El trabajador no está sujeto a un control visual permanente por parte de los empleadores: Así, no debe rendir cuentas sobre cuánto tiempo está sentado frente al ordenador o sobre las pausas que hace en sus labores.
Desventajas de trabajar en casa
Sin embargo, trabajar en casa también tiene sus desventajas.
Entre ellas, podemos destacar las siguientes:
- Exige mucha autodisciplina para cumplir horarios: De lo contrario, la persona podría terminar laborando hasta los fines de semana para cumplir los objetivos.
- No siempre es posible tener un espacio propio y libre de distracciones: Para solucionar esto, el individuo deberá adecuar algún lugar de la casa donde pueda concentrarse.
- Pueden suceder eventos que distraigan la atención: Desde cuando alguien toca la puerta hasta situaciones de emergencia si algún habitante del hogar tiene, por ejemplo, un accidente doméstico.
- La persona no tiene la oportunidad de socializar con compañeros de oficina: De manera que pueda ser que se sienta más solo.
- Aumentan otros costes: Aunque se reduce el coste de movilidad, es probable que aumente el coste de luz (y quizás también de teléfono) en la casa, además que se tendrá que contratar un servicio de Internet si no se cuenta ya con uno.
- Es una vida más sedentaria: La persona puede tender al sedentarismo, al no tener que salir de casa para ir al trabajo, y eso puede repercutir en la salud.