Incapacidad laboral
La incapacidad laboral es aquella situación en la que un trabajador no es capaz de asistir o realizar adecuadamente sus funciones en su puesto de trabajo.
La incapacidad laboral, por tanto, es la situación que se da cuando una persona no es capaz de poder asistir a su trabajo, así como desempeñar las funciones asociadas a este. Esta incapacidad se da por diversas razones, como puede ser un accidente, un embarazo, así como otra serie de situaciones.
Esta se mide por el grado de daño o del suceso que impide a esta persona ir a trabajar.
Dicha incapacidad está recogida por ley, así como reconocida por la Seguridad Social.
Tipos de incapacidad laboral
Como decíamos, dependiendo de la magnitud del suceso que impide la realización y el desempeño del trabajo, esta puede clasificarse en dos tipos:
- Incapacidad temporal: Es lo que se conoce como baja médica. La persona a la que hace referencia está incapacitada para asistir a su trabajo de manera puntual, pero prevé recuperarse en un plazo máximo de 12 meses.
- Incapacidad permanente: Esta incapacidad es la que se reconoce cuando, un trabajador, tras someterse a un tratamiento médico, presenta incapacidades que anulan, de forma permanente, la capacidad laboral del empleado.
Dentro de la incapacidad permanente tenemos diversos tipos, entre los que cabe destacar los siguientes:
- Incapacidad permanente parcial.
- Incapacidad permanente total.
- Incapacidad permanente absoluta.
- Incapacidad permanente total cualificada.
- Gran invalidez.
Derechos ante la incapacidad laboral
Cuando una persona presenta la incapacidad laboral, esta tiene una serie de derechos que le son otorgados, por haber cumplido con sus obligaciones ante la aseguradora (la cual puede ser publica o privada).
Entre esos derechos cabe destacar el derecho a una asistencia sanitaria que permita al trabajador recuperarse de la lesión o del daño provocado por el suceso que, en cierta forma, ha derivado en la incapacidad laboral.
Así como, también, el derecho a un subsidio económico. El cual, en función de las condiciones, el contrato, lo cotizado, así como otra serie de variables, podría alcanzar hasta el 75% de la base reguladora en casos de contingencias profesionales.
No obstante, cabría decir que estos derechos, en función del país al que hagamos referencia, pueden sufrir variaciones. Tanto en materia de derechos como en las cuantías y coberturas correspondientes a cada uno.
Requisitos para obtener la incapacidad laboral
Para obtener la incapacidad laboral, hay que cumplir una serie de requisitos.
Cuando hablamos de una incapacidad laboral temporal, esta no requiere requisitos para solicitarla. Más allá del parte médico que muestra un reconocimiento en el que se aconseja la baja médica y el reposo.
Mientras que, por otro lado, para solicitar la incapacidad permanente sí existen una serie de condiciones que deben cumplirse.
Estas condiciones son las siguientes:
- Estar dado de alta en la Seguridad social o en una aseguradora privada.
- Haber cotizado un tiempo mínimo; a no ser que sea por una enfermedad profesional o accidente laboral.
- No haber alcanzado la edad de jubilación.
No obstante, los requisitos, en función del país al que haga referencia, pueden sufrir variaciones.