Ley de rendimientos decrecientes: Qué es y ejemplos
- La ley de rendimientos decrecientes indica que agregar más de un recurso a la producción, manteniendo los demás constantes, resulta en un menor beneficio por cada unidad de recurso que se añade.
- Las empresas deben buscar el equilibrio óptimo en el uso de recursos para maximizar la eficiencia y evitar el desperdicio.
- Es relevante en cualquier proceso productivo, desde la agricultura hasta la manufactura y los servicios.
¿Qué es la Ley de rendimientos decrecientes?
La ley de rendimientos decrecientes es un concepto económico que muestra la disminución de un producto o de un servicio a medida que se añaden factores productivos a la creación de un bien o servicio.
La Ley de rendimientos decrecientes: Explicación sencilla
Dicho de una manera más sencilla, la ley de rendimientos decrecientes es una idea de la economía que nos dice cómo, después de cierto punto, al agregar más recursos para producir algo (como trabajo o maquinaria), conseguimos menos beneficio o resultado de cada uno de estos recursos adicionales.
Imagina que tienes una granja y contratas a un trabajador para que te ayude. Al principio, con cada nuevo trabajador que contratas, la producción de tu granja aumenta bastante. Pero claro, hay un límite. Después de contratar a un cierto número de trabajadores, tu granja se llena tanto de gente que se estorban entre sí, y cada nuevo trabajador que agregas no produce tanto como los anteriores. Esto no significa que la producción total baja, sino que el aumento de producción por cada nuevo trabajador disminuye.
Este fenómeno ocurre cuando mantenemos todo lo demás igual (por ejemplo, la cantidad de tierra y maquinaria) y solo aumentamos uno de los recursos. Es importante distinguir esto de las deseconomías de escala, que se refiere a cuando aumentar todos los recursos por igual resulta en una menor eficiencia. Normalmente, en la función de producción, cuántos más trabajadores hay mayor es la producción.
Es necesario explicar el concepto básico de los rendimientos marginales decrecientes. Si aumentamos la cantidad de un factor productivo y dejamos fija la cantidad empleada del resto, llegará un momento en el que la cantidad de producto final que obtenemos es menor a medida que vamos produciendo más y más. Puede incluso llegar un momento en el que al aumentar una unidad de factor empleado (por ejemplo, trabajo o maquinaria) la producción disminuye.
Es decir, parece ser que pese a lo que pueda pensarse a priori, aumentar un factor no solo no aumenta la producción del bien o del servicio sino que puede llegar a provocar una disminución gradual de la cantidad producida.
Su importancia
Esta ley es crucial porque nos ayuda a entender que siempre hay un punto óptimo de recursos que se pueden utilizar antes de que empezar a agregar más se vuelva contraproducente. Fue David Ricardo, un economista famoso, quien popularizó este concepto, aunque fue discutido por otros antes que él, tal y como hizo el napolitano Antonio Serra.
Para las empresas, entender y aplicar correctamente la ley de rendimientos decrecientes es vital para no gastar más de lo necesario y asegurar que cada inversión en producción aporte realmente al crecimiento.
Cuando alguien decide invertir en empresas, debe tener en cuenta este factor a la hora de analizarlas. Te recomiendo que hagas uso de este contenido complementario para profundizar en la materia: Curso de finanzas conductuales: La psicología de la inversión.
Ejemplo de la ley de rendimientos decrecientes
La existencia de los rendimientos decrecientes pueden parecer lógicos si lo pensamos desde el siguiente punto de vista:
Agregar más obreros a una construcción no garantiza una mayor rapidez o eficiencia en el trabajo.
Puede llegar un punto en el que tantas personas trabajando en un mismo espacio pueden llegar a incordiarse por falta de espacio y no realicen sus tareas correctamente. Una mayor cantidad de obreros hará que el nivel de producción disminuya por cada unidad de obrero empleado. En ese caso el aumento marginal de la producción es negativo.
Sucede lo mismo aumentando el factor capital. Por ejemplo, imagina que en un huerto trabaja solo una persona. El trabajo que tiene que hacer para producir es enorme. Si se compra un tractor podrá realizar mucho mejor sus tareas. Pero si compra otro tractor no le servirá de nada ya que no puede conducir los dos a la vez.
El primer tractor aumentó la producción, pero el segundo no tuvo efecto, mostrando un rendimiento marginal de cero.
Imaginemos que le regalan 10 tractores más. Añadir más tractores reduce la producción al ocupar espacio del huerto, ejemplificando el rendimiento marginal decreciente.
En Economipedia, queremos resolver todas tus dudas. Por eso, hemos recopilado las preguntas más frecuentes sobre este tema. Si no encuentras la respuesta que buscas, no dudes en dejarnos un comentario.
¿Qué es la ley de rendimientos decrecientes?: Es un principio económico que muestra que al aumentar la cantidad de un solo recurso en la producción, el beneficio adicional que se obtiene de cada unidad adicional de ese recurso disminuye, asumiendo que todos los demás recursos se mantienen constantes.
¿Cómo se diferencia de las deseconomías de escala?: Las deseconomías de escala se refieren a la reducción en la eficiencia cuando todos los factores de producción aumentan proporcionalmente, mientras que la ley de rendimientos decrecientes se aplica cuando solo se incrementa un recurso manteniendo fijos los demás.
¿Por qué es importante para las empresas entender esta ley?: Comprender y aplicar esta ley ayuda a las empresas a determinar cuánto de cada recurso deben utilizar para maximizar la eficiencia y la rentabilidad, evitando gastar más en recursos que no aumentan proporcionalmente los beneficios.