Sociedades de Garantía Recíproca
Las Sociedades de Garantía Recíproca (SGR) son entidades sin ánimo de lucro cuya función es lograr que las pequeñas y medianas empresas (PYME) y los autónomos puedan acceder a fuentes de financiación con mayor facilidad.
Las SGR se encargan de actuar ante las entidades financieras u otros agentes como avalistas de pequeñas empresas, con el fin de que estas puedan acceder a mejores condiciones de financiación que si acuden por sí mismas a una entidad de crédito. El banco percibe un riesgo inferior en una PYME avalada por una SGR, ya que estas están bajo la supervisión del Banco de España y además cuentan con capital procedente de los conocidos como socios protectores (Comunidades Autónomas, Cámara de Comercio, Diputaciones, etc.).
¿Qué requisitos son necesarios para acceder a las Sociedades de Garantía Recíproca?
Las SGR solo pueden ofrecer garantías a aquellas empresas que sean socios partícipes. Cualquier PYME que quiera acceder a las ventajas de una SGR tendrá que adquirir participaciones de la SGR. Esto permite que las SGR obtengan recursos económicos para incrementar su solvencia y poder continuar con la actividad que realizan.
Beneficios de las SGR
Entre otros beneficios podemos destacar las siguientes:
- Incremento en la capacidad de negociación.
- Mejora de las condiciones financieras (tipos de interés más reducidos).
- La PYME es más atractiva para las entidades financieras al contar con una garantía de este tipo.
- Disminución de los trámites de formalización de créditos.
- Ofrecen asesoramiento para otro tipo de operaciones.
- Posibilidad de acceder a fuentes de financiación diferentes, antes inalcanzables.