Clima organizacional
El clima organizacional es el ambiente generado por las prácticas de los trabajadores de una empresa y que se materializa en las actitudes que tienen para relacionarse entre sí.
El clima organizacional de una empresa depende de muchos factores y el primero de ellos es la importancia que la propia compañía le dé.
Los objetivos pueden alcanzarse con metas, objetivos y una herramienta de control que supervise los indicadores de gestión y avance. Bien, para ese proceso no se necesita liderazgo, por lo que el factor “clima organizacional” pasa completamente por alto, porque el foco no está puesto allí, sino en el cumplimiento de la meta y objetivo. Es ahí donde pueden generarse instancias de quiebre de las relaciones entre trabajadores o colaboradores. Ya que las metas pueden ser tan altas, exigentes y peor aún, individuales, que todos velarán por cumplir su parte al costo que sea.
Sin duda ese costo, puede traducirse en excesiva competitividad, traición entre compañeros, canales de comunicación difusos, instrucciones poco claras y poco ánimo de colaboración. Es decir, un clima organizacional impulsado por un tipo de violencia estructural que viene desde la organización por haber planificado sólo en base a indicadores y sin pensar en las personas y además, por hacer que los cumplimientos sean individuales en vez de colectivos.
Por el contrario, si el liderazgo está presente como elemento esencial en el proceso de dirección, el “clima organizacional” sí será un factor presente e incluso, el de mayor relevancia. Esto es debido a que las personas como “recurso” son el más difícil de controlar. En este sentido, apostar por la motivación desde la estructura organizacional puede generar altísimos niveles de compromiso y, por ende, de productividad.
Clima organizacional presente en los valores de la compañía
Es legítimo que las empresas tomen medidas para mantener un buen clima organizacional porque eso les trae mayor rentabilidad. Dicho esto, cabe destacar que hay compañías que integran esto en sus valores por sobre los resultados de producción y esto lo materializan en incentivos permanentes que no están sujetos al cumplimiento de metas, sino como política de la empresa.
Algunos de estos incentivos son flexibilidad, becas de estudio, planes de desarrollo al interior de la compañía, relaciones cercanas con las jefaturas y posibilidad de plantear sugerencias y propuestas para el negocio.
Responsabilidades y roles en el clima organizacional
Si bien, la empresa puede velar por mantener relaciones sanas y colaborativas al interior de la organización, lamentablemente no puede hacerse responsable de rencillas personales que vayan generándose en la convivencia diaria. Estos problemas tienen relación con la formación ética y personal de los trabajadores, por lo que es importante que exista voluntad de parte de ellos en construir un clima agradable para trabajar, considerando que el trabajo es uno de los lugares donde las personas pasan más tiempo.
Si los trabajadores se organizan y crean prácticas que les hacen más felices en su trabajo y esto no interviene de manera negativa en el quehacer de la empresa, es suficiente con que la compañía entregue esa libertad, pero no puede hacerse responsable por los quiebres personales que se generen durante esa dinámica.
Por último, si estas prácticas, por el contrario, comienzan a afectar las relaciones entre colaboradores, entonces la compañía deberá identificar el problema y aplicar medidas para ordenar los espacios de trabajo de modo que sean instancias cómodas sin poner en riesgo el respeto entre personas.
En síntesis, el clima organizacional es una interfaz que forma parte de la comunicación de una empresa, donde los trabajadores, por una parte, deben tener el espacio suficiente para construir prácticas amenas de trabajo, y por otra, la organización debe fortalecer estos espacios aportando con incentivos, beneficios y prácticas propias de su cultura organizacional. El objetivo al final del día es construir una compañía más satisfecha y feliz, lo que, por consecuencia, será más competitiva en el mercado.