Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB)
El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) es un organismo creado en 2009 para la reestructuración del sistema financiero español, a través de la recuperación y resolución de entidades de crédito y empresas de servicios de inversión (ESI).
En palabras más sencillas, el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) es un organismo que se creó con el fin de poner en orden el desbarajuste de las entidades de crédito, acrecentado por la crisis financiera de 2008.
El real decreto-ley por el cual fue aprobado recoge que sus dos principales objetivos son hacer frente a la gestión de los procesos de reestructuración de las entidades de crédito y contribuir a reforzar sus recursos propios en los procesos de integración de entidades. Crear una hucha para arreglar los problemas financieros que se vayan presentando en el proceso de recuperación económica.
¿Cuál es su función?
Se trata del mecanismo encargado de sacar a flote el sistema financiero español. Para ello llevará a cabo la revisión de las entidades que lo forman y las inyecciones de capital pertinentes. Dichas revisiones han provocado consecuencias en el tejido bancario. Por un lado, no pocas entidades han sido intervenidas. Otras han tenido que fusionarse para cumplir los requisitos de solvencia y poder acceder a las ayudas del FROB.
Organigrama del FROB
El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria es administrado por una Comisión Rectora. La Comisión Rectora está formada por 11 miembros:
- Presidente
- Cuatro miembros nombrados por el Banco de España
- Tres miembros en calidad de representantes del Ministerio de Economía y Empresa.
- El Vicepresidente de la CNMV
- Otros dos miembros en calidad de representantes del Ministerio de Hacienda.
Financiación del FROB
La primera dotación que recibió este fondo fue de 9.000 millones de euros, el 75% por parte de los Presupuestos Generales del Estado y el 25% a cargo de fondos de garantía de depósitos de bancos, cajas de ahorro y cooperativas de crédito.
Posteriormente, conforme al Real Decreto-Ley 2/2012, se amplió en 6.000 millones de euros hasta alcanzar los 15.000 millones de euros. Además, el FROB podrá incrementar sus fondos a través de deuda en la que figure el Estado como acreedor.
En otras palabras, esta hucha no funciona como las de toda la vida. Tiene la característica de endeudamiento, es decir, puede gastar más que lo que guarda es su interior. En la fecha de creación era de 45.000 millones, el límite para el ejercicio de 2012 fue de 120.000 millones y en 2014 se rebajó el límite hasta los 63.500 millones de euros.
Los presupuestos anuales correspondientes a los últimos ejercicios pueden ser consultados en su página oficial. Ver información presupuestaria del FROB