Futuros sobre bonos
Los futuros sobre bonos son contratos de futuros que tienen como activo subyacente instrumentos de renta fija, en este caso en específico, bonos.
Es decir, los futuros sobre bonos son acuerdos por los cuales se pacta la compraventa de bonos. Esto, en un plazo y a un precio determinado.
Debemos recordar que un contrato de futuros es un acuerdo por el que dos agentes aceptan intercambiar un activo en una fecha posterior fijada. Esto, a un precio establecido de antemano.
El activo intercambiado puede ser físico o financiero. En lo que compete a este artículo, hablaríamos de un activo financiero, pues un bono se enmarca en dicha categoría.
No debemos olvidar que en este tipo de contrato es importante la participación de una Cámara de compensación. Esta se encarga de pedir y administrar las garantías necesarias. De ese modo, se evita el riesgo de incumplimiento por alguna de las partes del contrato.
Otro punto a tener en cuenta es que, a diferencia de una opción financiera, en el caso de los futuros, el vendedor tiene la obligación, al vencimiento, de entregar el activo subyacente al comprador, y este debe pagar el precio. Además, para adquirir el futuro, el comprador paga una suma que usualmente es un porcentaje del valor del contrato.
¿Quién gana y quién pierde en los futuros sobre bonos?
En un futuro sobre bonos, la parte compradora espera que el precio suba. También se dice que tiene una posición larga.
Si al vencimiento del contrato de futuro el precio del bono es mayor al pactado, el comprador obtiene una ganancia. Puedes entenderlo de esta forma: El comprador puede vender el bono a un precio más alto al que lo compró.
En la otra orilla, el vendedor del bono tiene una posición corta y espera una caída del precio. Esa es su especulación.
Si a la fecha del vencimiento, por ejemplo, el precio del bono es menor al pactado, el vendedor habrá ganado. Esto es porque pudo vender el activo por una suma mayor a la que le pagarían hoy.
¿Y de qué dependen las fluctuaciones de los precios de los bonos? Uno de los factores más relevantes es el tipo de interés. La relación es inversamente proporcional. Es decir, si el tipo de interés baja, el precio del bono sube y viceversa. Para entenderlo a detalle puedes visitar la siguiente nota:
Ejemplo
Un ejemplo de contrato de futuros sobre bonos podría ser uno con las siguientes características:
- Activo subyacente: bono de deuda pública con un cupón anual de 5%. Vencimiento a 5 años.
- Valor nominal del contrato: 10.000 euros.
- Cotización: porcentaje del nominal.
- Vencimientos de los cupones: marzo, junio, septiembre, diciembre.
Cabe señalar que estas solo son algunas de las características que se especifican en el contrato, a las que se añaden otras como las garantías y los horarios de negociación.