Inversión ética

La inversión ética es aquella que realizamos teniendo en cuenta una serie de criterios éticos relacionados con nuestras normas morales o creencias.

Por tanto, estamos ante una forma de invertir que no busca la rentabilidad, sino algo más. Así, nos centramos en empresas que actúan acorde con nuestras creencias y valores. En este caso, el dinero pasa a un segundo plano y priorizamos los principios.

Pero no debemos pensar que la rentabilidad no es importante, ya que nadie invierte para perder dinero. Lo que sucede es que la decisión de inversión no se centra solo en la mejor relación rentabilidad precio, sino en la mejor relación de estos con la ética.

Cómo llevar a cabo una inversión ética

Este tipo de inversión ética tiene un proceso similar al de las tradicionales. De hecho, la diferencia reside en el interés por una serie de variables difíciles de medir y basadas en las creencias y valores. Veamos de qué pasos constaría.

  • En primer lugar, debemos hacer algo de introspección. Esto puede parecer evidente, pero es más importante y necesario de lo que parece. Debemos descubrir cuáles son nuestras prioridades y, por tanto, cuál es nuestro perfil inversor.
  • Por otro lado, toca decidir dónde invertir. Este es el paso más complicado, ya que los datos económicos o financieros de los diferentes organismos no se centran en aspectos éticos. Por tanto, habrá que leer periódicos, revistas especializadas o artículos de investigación.
  • Una vez hemos tomado la decisión, hay que elegir la plataforma o entidad intermediaria. Aquí nos ayudará tener un criterio objetivo centrándonos solo en esas empresas que cumplan lo que queremos. Esto es lo que se llama aplicar una lente.

La ética y la sostenibilidad

Estos dos conceptos no deben confundirse. El primero, la ética, son creencias de la persona que cumplen una serie de criterios y que se centran en la conducta. La sostenibilidad está relacionada con un crecimiento respetuoso con el medio ambiente que aúne desarrollo y protección.

Ahora bien, ambos están relacionados. Una vertiente importante de la ética es el medio ambiente y el crecimiento sostenible. Vivimos en un planeta que debemos proteger y cuidar. De hecho, el interés por la sostenibilidad es cada vez mayor.

Los criterios en la inversión ética. Los fondos éticos

La inversión ética se rige por una serie de criterios que, a su vez, van a depender del perfil del inversor. De hecho, existen una serie de fondos que se clasifican siguiendo este argumento:

  • Fondos con criterios ambientales (ESG). En este caso, se centran en la protección del medio ambiente o la sostenibilidad.
  • Fondos socialmente responsables (ISR). En este tipo de fondo el objetivo es la responsabilidad social corporativa (RSC).
  • Fondos de Impacto. Estos aúnan el interés por el binomio rentabilidad-riesgo y por la ética en los productos o servicios ofrecidos.
  • Fondos religiosos. Como su nombre indica, se interesan por el perfil religioso del inversor.

Ejemplo de inversión ética

Para terminar, vamos a ver ejemplos concretos de inversión ética y de un concepto que apareció con esta, la banca ética. Por un lado, existen una serie de fondos de seguimiento como el iShares MSCI KLD 400 Social ETF o el iShares Dow Jones Global Sustainability Screened UCITS ETF.

Estos aportan información sobre las compañías con mayores puntuaciones en el índice ético (ESG). De esta forma, se da cierta objetividad que permite al inversor comparar empresas mediante este indicador.

Por su parte, la banca ética surgió en los años 60 y su objetivo era promover el uso responsable y transparente del dinero, incluyendo la inversión ética. Entre los más conocidos en España tenemos a TriodosBank, FonRedess u Oikocredit.

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Enrique Rus Arias , 02 de julio, 2022
Inversión ética. Economipedia.com