Tal vez Red Bull no sea la marca de bebidas con mejor sabor. Pero la compañía austríaca de bebidas energéticas ha conseguido posicionarse como líder del sector gracias a una más que acertada e innovadora campaña de marketing.
Los fundamentos de la estrategia de Red Bull se han basado en crear una imagen de marca fuerte asociándola a la aventura y el deporte. Para ello, Red Bull recurrió a herramientas de marketing rompedoras y poco habituales, también conocido como el anti marketing.
La presencia en deportes de riesgo, en el mundo del motor o el papel jugado por los embajadores de la propia marca han resultado determinantes en este éxito comercial.
Un espíritu innovador y activo desde sus orígenes
Red Bull desembarcó en el mercado en 1987 de la mano del austríaco Dietrich Mateschitz y el tailandés Chaleo Yoovidhya. Mateschitz, inspirado por las bebidas que había descubierto en un viaje a Tailandia, decidió apostar por una bebida energética como respuesta al agotamiento físico y mental.
Más allá del propio producto, Red Bull siempre se esforzó por transmitir una imagen de marca activa, relacionada con los deportes y con un estilo de vida aventurero. Los métodos para forjarse esta imagen de marca han sido muy distintos a los empleados por otras compañías.
Ya su eslogan y su logotipo resultaron llamativos y pegadizos. La bebida austríaca no tardaría en ser reconocida por su lema “Red Bull te da alas”. Por lo que respecta al logotipo, los dos toros rojos transmiten al público una visión de vigor y dinamismo.
Pero, la estrategia de marketing de Red Bull no se limitó a un lema pegadizo y a un vistoso logotipo. Así, en la década de los 90, Red Bull empezó a dejarse ver en eventos deportivos. Esta creciente presencia en el mundo del deporte le hizo ganar notoriedad y permitió progresar a la empresa austríaca, al tiempo que reforzaba su imagen de dinamismo y aventura.
¿Cuál ha sido la clave en la estrategia de marketing de Red Bull?
Como parte de sus estrategias disruptivas, Red Bull apostó por una gran visibilidad en los llamados deportes extremos. Así, es posible encontrar a la compañía en competiciones deportivas como la Fórmula 1, el motocross y el snowboard entre muchos otros.
No solo la presencia en competiciones oficiales impulsa el estilo aventurero y dinámico de Red Bull. La empresa también ha patrocinado eventos como el Red Bull Rampage con el ciclismo de montaña libre. También el salto desde la estratosfera del paracaidista Felix Baumgartner o el campeonato de acrobacias aéreas Red Bull Air Race.
El patrocinio de eventos ha resultado fundamental en el camino ascendente de Red Bull. Pero también la creación de sus propios contenidos audiovisuales ha formado parte de su éxito. Sus cortometrajes con un estilo original y su presencia en plataformas como YouTube y su propio canal Red Bull TV han supuesto una importante contribución.
Asimismo, la presencia de destacadas personalidades de la música y el deporte ha tenido un impacto significativo en la imagen de marca por la que tanto se ha esforzado Red Bull. Prueba de ello son personalidades públicas relacionadas con un estilo de vida dinámico como el piloto de Fórmula 1 Daniel Ricciardo o personalidades del mundo de la música como Skrillex.
Se trata de los denominados embajadores de marca que, en definitiva, son personalidades de gran popularidad contratadas para transmitir y difundir una imagen positiva de la empresa.
Difusión entre los consumidores, redes sociales y marketing de guerrilla
El “boca a boca” o las opiniones que se transmiten entre los propios consumidores ha tenido su influencia en la difusión de los productos de Red Bull. Pero, esta difusión de consumidor a consumidor, fue estimulada por la propia compañía de bebidas energéticas. En este sentido, resultó determinante la distribución de muestras gratuitas en eventos deportivos y fiestas.
No menos importante fue la creación de eventos deportivos y de actividades relacionadas con deportes extremos. Prueba de ello fue el famoso Red Bull Stratos, cuando, durante cuatro horas, la audiencia estuvo pendiente del salto desde la estratosfera de Felix Baumgartner. Para Red Bull, aquello fue como disponer de cuatro horas seguidas de anuncios en televisión, algo sencillamente impagable para muchas empresas.
Las redes sociales han demostrado ser un elemento indispensable del marketing. Por lo que Red Bull ha mostrado una constante presencia en Facebook, Twitter, Instagram, YouTube y Linkedin. También la denominada Red Bull Media House ha desarrollado un importante trabajo en la creación de contenidos audiovisuales. Difundidos a través del propio canal de YouTube de Red Bull y de Red Bull TV. La idea de Red Bull a este respecto es clara, pues crea contenidos audiovisuales que susciten emociones y que impulsen un espíritu deportivo y rebosante de vitalidad.
Sin embargo, toda campaña en redes sociales y su impacto deben ser analizados. He aquí donde entra en juego la métrica de Red Bull. La cual ha permitido a la compañía valorar acertadamente el alcance de su campaña y el impacto entre los distintos segmentos del mercado.
Tampoco puede olvidarse que, frente a opciones de marketing más tradicionales, Red Bull ha sido partidaria de recurrir a medidas pioneras. De hecho, el fabricante de bebidas energéticas fue una de las primeras empresas en hacer uso del marketing de guerrilla. Prueba de ello son el reparto de muestras gratuitas de bebidas, su presencia sorpresa en eventos o la organización de espectáculos.
El éxito a través del marketing
No cabe duda de que la exitosa estrategia de marketing de Red Bull ha ayudado a la compañía austríaca a posicionarse como líder del sector. Su presencia internacional es más que notoria, vendiendo desde 1987 hasta 2021 más de 82.000 millones de latas de la famosa bebida energética.
El patrocinio de eventos deportivos ha contribuido decisivamente a la identificación y reconocimiento de la marca. Cada vez que se visualizan los toros rojos de Red Bull, el público lo asocia a carreras de Fórmula 1, motocross o acrobacias aéreas, entre otros.
El correcto manejo de las redes sociales y sus contenidos virales han permitido a la marca gozar de una gran difusión y seguimiento. A su vez, la marca y sus productos han resultado ampliamente acogidos en la cultura popular. Siendo referenciados en obras cinematográficas y musicales, así como en programas de televisión.
En definitiva, los aspectos determinantes en la exitosa campaña de marketing de Red Bull han sido la creación un fuerte vínculo con su público, la creación de contenidos virales que promocionan un estilo deportivo y dinámico, un acertado patrocinio deportivo y una imagen cimentada sobre la diferenciación.