La economía brasileña se mantiene en vilo antes de las elecciones. El discurso conservador de Bolsonaro se enfrenta a la izquierda del Partido de los Trabajadores. Las bolsas se agitan y el real brasileño se fortalece ante el dólar americano. ¿Qué pasará tras las elecciones? Esa es la principal pregunta que ronda sobre las cabezas de muchos inversores.
Dos formas de hacer política, dos partidos enfrentados, dos líderes contrapuestos y unas elecciones polarizadas. La campaña electoral brasileña no ha dejado indiferente a nadie. Pero ahora, cuando todo está a punto de decidirse, ¿Qué pasará con la economía brasileña?
Claro está que las consecuencias serán diferentes según el candidato electo. Bolsonaro representa la derecha, el conservadurismo y el liberalismo económico. Por su parte, el sucesor del expresidente Lula, Fernando Haddad, refleja los ideales de la izquierda: más control del estado y más apoyo a los desfavorecidos.
Por ahora, según datos de Datafolha el ganador sería Jair Bolsonaro. No obstante, sería con menos del 50% del apoyo. Lo que supondría una segunda vuelta que enfrentara a los dos candidatos más votados.
La recesión en Brasil
Brasil ha estado inmerso en una crisis de gran calado. Desde el año 2013 hasta la actualidad el PIB real de Brasil se ha visto relegado a cifras desastrosas. Decrecimientos situados en el 3,5% en los años 2015 y 2016. Ahora, el país vuelve a arrojar cifras esperanzadoras. No obstante, si es que se puede afirmar algo, podríamos afirmar que Brasil salió de la recesión, no de la crisis.
Durante estos días, con el pueblo brasileño a punto de introducir su voto en las urnas, se plantean más dudas que nunca. Más incertidumbre que nunca. Y eso es lo que refleja el principal índice bursátil de Brasil.
El índice Bovespa
Cómo bien es sabido, los índices bursátiles representan un buen indicador del estado de una economía. Volatilidad significa incertidumbre. Subidas buenas noticias. Mientras, las caídas indican que algo no va bien.
Cómo vemos en el gráfico anterior, durante el último año, la bolsa de Brasil (Índice Bovespa) no ha tenido una tendencia definida. Se ha mantenido lateral y con los niveles de volatilidad en aumento. Así, desde los mínimos marcados a finales de junio en el entorno de los 70.000 puntos, la bolsa de brasil ha subido hasta los 83.000 puntos básicos. Lo que supone una subida de casi el 20% en tan solo 3 meses.
La volatilidad en aumento
Al mismo tiempo, la volatilidad, que se situaba en mínimo históricos a principios de año, ha vuelto a aumentar. Pasando así, del 16% de principios de año, hasta el 30% de finales de julio.
Dado el momento político y económico en el que Brasil se encuentra, no sería extraño ver los niveles de volatilidad en aumento. Niveles, todo sea dicho, aún lejos de los máximos de los últimos 3 años. Los cuales, se sitúan en niveles superiores al 40%.
Escenarios posibles en la bolsa de Brasil
Nadie sabe qué pasará. Algunas encuestas indican que los resultados electorales serán ajustados. Sugiriendo, de este modo, que habrá una segunda vuelta. No obstante, salvo sorpresa de última hora todo parece señalar que Jair Bolsonaro o Fernando Haddad serán los candidatos a la presidencia.
Dependiendo de cómo se desarrollen los acontecimientos, el índice Bovespa, podría tomar uno u otro camino. En este sentido, se podrían indicar tres posibles escenarios.
- Bolsonaro gana las elecciones: Según indican algunos bancos de inversión, dado el perfil económico de su partido, sería de esperar que la bolsa reaccionara al alza. No obstante, debemos tener en cuenta la posibilidad de que los inversores ya lo hayan descontado en las últimas subidas. Por su parte, podría verse un movimiento de fortaleza del real brasileño frente al dólar.
- Haddad gana las elecciones: En caso de ganar Fernando Haddad, se esperarían caídas en las bolsas. Algunos bancos, como JP Morgan, indican que la caída supondría entre un 5 o un 10%. A pesar de todo, no lo consideran un caso probable.
- Otro resultado: Como elecciones presidenciales que son, pueden darse muchas variaciones. Estas variaciones afectarían, sin lugar a dudas, a los movimientos de la bolsa de Brasil. Lejos de subidas o caídas, la incertidumbre siempre lleva consigo aumentos de volatilidad.
En definitiva, en bolsa nada está escrito. Solo quedará esperar y ver qué sucede. Y más importante aún, cómo interpretan los inversores los sucesos. Ya que dependiendo de las interpretaciones sus decisiones cambiarán al lado alcista o al lado bajista.