Economía de subsistencia
La economía de subsistencia es aquella en la que cada individuo o familia produce lo que consume. Si se generan excedentes, son escasos y se venden o intercambian mediante el trueque, siendo esto último lo más común.
La economía de subsistencia se basa en la caza, recolección, agricultura, pesca y ganadería, que permiten obtener los alimentos y vestimentas de las personas. Otras actividades desarrolladas son la artesanía y la extracción forestal.
Estos sistemas económicos, también conocidos como sociedades de autoconsumo, han ido desapareciendo debido al progreso industrial, en particular, de los últimos dos siglos. Sin embargo, aún prevalecen en ciertos grupos humanos aislados, sobre todo, en los países menos desarrollados.
Características de la economía de subsistencia
Las principales características de la economía de subsistencia son las siguientes:
- Es propia de una sociedad preindustrial, es decir, aquella anterior a la Revolución Industrial I de la segunda mitad del siglo XVIII.
- Hay escasa división del trabajo, es decir, baja especialización. Esto significa que son pocos los tipos de oficio que se desarrollan, como agricultor o ganadero, siendo muy simples los procesos de producción.
- Los intercambios comerciales son limitados, debido a sistemas de transporte poco eficientes (alto costo y largo tiempo de duración).
- Es una economía principalmente basada en la agricultura, complementada con la ganadería. En estas actividades se utilizan técnicas primitivas a pequeña escala y que registran bajos rendimientos.
- Predomina el ámbito rural y hay pocas ciudades.
- La producción tiene una alta dependencia del factor climático (lluvias, sequías, inundaciones, entre otros) al igual que de la salud de los trabajadores. Si estos enferman, por ejemplo, se afectarán las provisiones de la familia.
Tipos de economías de subsistencia
Los tipos de economías de subsistencia son dos:
- Sistema de trueque: Es un esquema simple donde se establecen roles definidos para el hombre, trabajando el campo y en el servicio militar, y para las mujeres, en las tareas domésticas. Los individuos producen para su propio consumo e intercambian algunos bienes por otros que consideren de valor equivalente para satisfacer necesidades básicas.
- Feudalismo: Este sistema es más complejo que el anterior, existiendo varias clases sociales. En la cima de la pirámide, figura la nobleza, la máxima autoridad con privilegios económicos, seguida por el clero. Luego, se encuentran los señores feudales que son los propietarios de la tierra, el principal medio de producción. Finalmente, en la base de esta estructura social, está el pueblo. Dicho grupo se somete al señor feudal y trabaja para él, recibiendo a cambio protección militar.
Crisis de subsistencia
La crisis de subsistencia es una circunstancia que atraviesa una economía de autoconsumo cuando hay escasez de alimentos. Esto puede ser producto, por ejemplo, de una mala cosecha.
En consecuencia, como la sociedad no realiza intercambios comerciales frecuentes con otros pueblos, se genera hambruna e incluso altos niveles de desnutrición. Esto, a su vez, puede desatar enfermedades e incrementar los índices de mortalidad.
Las crisis de subsistencia, en el extremo, desencadenan conflictos sociales, e incluso militares, debido al descontento generalizado de la población.