Exceso de crédito
El exceso de crédito, desde un punto de vista microeconómico, es una situación en la que el deudor, necesita disponer de una cantidad de dinero mayor que la establecida en el límite de crédito concedido. En un aspecto macroeconómico se refiere a una situación en que los bancos prestan más dinero del necesario para las inversiones.
De forma sencilla podemos decir que, en el aspecto microeconómico, se da cuando disponemos de más dinero del que establece nuestra póliza de préstamo. No debemos confundirlo, por tanto, con el descubierto en cuenta, que es una autorización excepcional. A un nivel macro, este problema se da cuando la banca de un país presta más dinero del que realmente hace falta. De esta forma, se produce una situación en que los préstamos aumentan a niveles que podrían considerarse excesivos.
Características del exceso de crédito
Para el particular hay que tener en cuenta una serie de detalles en relación al exceso de crédito. De hecho, es algo ocasional y por ese motivo, no debe utilizarse a la ligera.
- En primer lugar, siempre aparecerá en el contrato de crédito o préstamo. De esta forma, en él se indicará cuánto, cuándo, cómo y sobre todo, el coste que tendrá.
- Todas las condiciones deben publicarse en el tablón de anuncios de la entidad. Es decir, debe dejar claro al cliente lo que le va a cobrar y cuáles son las condiciones para acceder a este exceso de crédito y esto debe ser público.
- La entidad tiene derecho a cobrar un tipo de interés diferente al del propio crédito o préstamo. De hecho, suele ser superior y puede consistir en un interés fijo o en un diferencial sobre el tipo ordinario.
En el ámbito de un país, también se pueden promover situaciones excepcionales que pueden provocar en el corto plazo excesos de crédito. Normalmente van acompañadas de excesos de liquidez anteriores que se canalizan hacia los préstamos, sobre todo hipotecarios. Para que está situación se de, el banco central encargado de la política expansiva, debe justificar su actuación y establecer los límites.
Ejemplo de exceso de crédito
Con un ejemplo veremos todo lo anterior más fácil. Imaginemos que el banco nos concede una tarjeta de crédito que nos permite disponer de hasta 3.000 €. Realizamos una serie de comprar y un mes nos damos cuenta que vamos a necesitar 200 € más.
Aunque lo mejor es siempre pagar esta diferencia en efectivo, al ser un ejemplo, pensemos que no tenemos el dinero y necesitamos hacer esa compra. Vamos al banco y nos dice que de acuerdo, que en el contrato estaba establecida esta posibilidad. Pero que al ser un exceso del límite debe cobrarnos un interés un 5% superior al que nos cobra por la tarjeta. Al final pagaremos un tipo de interés por esos 3.000 € gastados y otro, un 5% mayor, por los 200 €.
Al igual que sucedía con los excesos de liquidez, en el ámbito nacional, un exceso de crédito que se mantenga demasiado tiempo puede acabar generando una burbuja. En la crisis de 2008 sucedió algo parecido, sobre todo con los préstamos hipotecarios.