Patriarcado
El patriarcado es una forma de organización social en el que el hombre ostenta la autoridad y ejerce su posición dominante sobre la mujer.
Bajo el patriarcado, el hombre está en una clara situación de privilegio y dominio sobre la mujer, quedando esta relegada a las tareas secundarias. Esta situación se observa en todos los aspectos de la sociedad, en el ámbito profesional, familiar, político, religioso, económico, etc.
Origen del patriarcado
Según la historiadora Gerda Lerner, el origen del patriarcado no fue la superioridad física del hombre sobre la mujer. Sino que se produjo por una combinación de factores demográficos, culturales ecológicos e históricos.
También señala que, probablemente, con la domesticación de los animales el hombre viese que el rol de la mujer era el de la reproducción. Otro factor sería la noción de la propiedad privada, al querer dejar a los hijos sus propiedades, los hombres exigirían fidelidad a la mujer.
No obstante, como indica Gerda Lerner existen muchos factores que pudieron influir.
Patriarcado y religión
Otro de los factores que ha marcado la existencia de la sociedad patriarcal han sido las religiones. Tradicionalmente, la religión ha asentado estas bases conservadoras en las que el papel del hombre era el del sustento económico del hogar, y el papel de la mujer era el del cuidado de la casa y de los hijos. Esta ha sido la dinámica de todos los países cristianos durante siglos.
El Islam va más allá si cabe, la mujer en los países árabes está totalmente fuera de la vida pública y totalmente subyugada al hombre. El Corán promueve que los hombres sean protectores de las mujeres. Solo está permitida la poligamia masculina, es decir, el hombre puede tener varias esposas, pero la mujer no puede tener varios esposos. En Arabia Saudí hasta el año 2018, no se les permitía conducir, tampoco votar, y para trabajar necesitaban autorización del padre o del marido.
Hay que añadir, que el patriarcado no es exclusivo de las culturas religiosas. Durante, los primeros años de la Unión Soviética sí que se ampliaron los derechos de las mujeres, pero con la llegada de Stalin al poder, a partir de la década de 1930 se empezó a realizar una involución en estos derechos.
Patriarcado en el siglo XXI
Con la implantación de las democracias occidentales se ha realizado una equiparación total de derechos entre hombres y mujeres, quedando prohibido la desigualdad salarial y otras prácticas similares. La mujer puede realizar personal y profesionalmente todas aquellas tareas y proyectos vitales que desee.
Ahora bien, hay algunas culturas como la islámica que sigue marginando a las mujeres, pero poco a poco se va observando un avance en su equiparación con los hombres.