Pro forma
Pro forma es una expresión latina que significa “para la forma” y se utiliza para un tipo de facturas, liquidación o recibos que no son definitivas.
Pro forma se utiliza habitualmente para definir un tipo de facturas, liquidación o recibos y estas son las que aún no son firmes, son una especie de presupuesto antes de realizar la factura, liquidación o recibo final que se tendrá que abonar.
Aunque es una especie de presupuesto, esta factura proforma se suele utilizar después de haber dado el presupuesto, podría entenderse el proceso así:
Factura proforma
Esta factura se puede entender como pre-factura, donde se expresan los detalles de un pedido tanto de un servicio como de un producto. La factura proforma no es una factura real.
Su contenido es el mismo que una factura final. Incluye todos los conceptos necesarios para que la factura tenga validez. Son modelos de factura iguales para cualquier servicio y sus detalles se contendrán en la factura definitiva.
Es habitual utilizar la factura proforma en el comercio internacional para operaciones de leasing o licencias de importación. También es habitual realizar este tipo de factura en los servicios de abogacía.
Las facturas proforma internacionales son documentos que especifican una oferta comercial y, a su vez, debe indicar la forma que tendrá la factura definitiva. Una vez hecha la factura proforma se emitirá la factura definitiva cuando se haya hecho efectiva la venta.
Al ser un documento previo, no es un documento válido para la Agencia Tributaria para revisar los impuestos. La factura proforma no tiene validez como justificante de pago.
Detalles de la factura proforma
Los detalles de una factura proforma son:
- Fecha de emisión de la factura.
- Datos del proveedor.
- Datos del cliente.
- Descripción de los productos o servicios.
- Precio de los productos o servicios
- Precio total de la factura proforma.
- Los impuestos.
Requisitos de la factura proforma
Por su padre, lo requisitos son los siguientes:
- El título de una factura proforma debe especificar que se trata de una factura proforma y no de una factura definitiva. Es decir, en el encabezado tiene que destacar que se trata de una factura proforma.
- Siempre debe tener la identificación del vendedor y del comprador, incluyendo todos los datos como razón social, nombre comercial, datos de contacto y dirección.
- Debe ser clara y fácilmente entendible para que la otra parte sepa cuáles son los detalles del servicio o compra.
- No debe tener ningún valor contable, aunque en la misma se detalle el IVA.