Una de las materias primas en torno a la que se ha generado mucho interés durante los últimos años ha sido el café. La producción sigue aumentando, pero los precios han caído cerca del 70%.
Como cualquier mercado, la ley de la oferta y la demanda se pone a trabajar y ajusta los precios. No obstante, aunque teóricamente está muy claro, en la práctica no es tan fácil de analizar. Durante los últimos años la producción de café no se ha ajustado todo lo que debería al consumo mundial.
En consecuencia, el precio del café sigue cayendo y el final o continuación de la tendencia bursátil en curso dependerá del reajuste del mercado.
Producción y consumo de café a nivel mundial
Según la Organización Internacional del Café (ICO por sus siglas en inglés), la diferencia entre lo producido y lo consumido su situó a finales de 2018 en el 4,76%. Lo que supone el valor más alto de los últimos ejercicios.
A largo plazo, como vemos en el gráfico inferior, la producción de café ha aumentado a un ritmo constante. Así, en los últimos 30 años, la producción ha crecido un 86%.
Con estos datos sobre la mesa, cabe preguntarse, ¿qué ocurrirá con los futuros del café? Así que, desde un punto de vista bursátil vamos a ver cómo se presenta el gráfico de los futuros del café.
Análisis bursátil del café
Como todos sabemos, nadie sabe si subirá o bajará, ya que lo supiéramos seríamos ricos. Parece una obviedad pero me gusta decirlo por si existiera alguna duda. Ahora bien, hay ciertas bazas con las que sí que podemos analizar el mercado.
En primera instancia, viendo el gráfico logarítmico del café nos encontramos con un gráfico típico de una materia prima durante los últimos años. Con tendencias estacionales, movimientos bruscos y una aparente homocedasticidad. Llama la atención el aumento del volumen negociado. Parece que muchos operadores, especuladores de café o productores se están cubriendo en estos precios. A lo que podemos encontrar dos significados:
- Están entrando con posiciones cortas pensando que la tendencia del café va a seguir a la baja. Lo que en el caso de los productores serían coberturas.
- Los operadores están comprando porque tienen información sobre el precio del café y prevén un giro al alza.
Para un trader, este panorama no tiene vuelta de hoja. Si se genera un patrón alcista entrará largo, si se genera un patrón de continuidad bajista entrará corto y si no lo ve claro no entrará.
Como venía diciendo, aunque no podamos saber la dirección del mercado con los datos aquí expuestos sí que podemos hacer una inferencia que tiene su interés. No ya sólo por las aplicaciones que podría tener para este mercado durante el el próximo lustro, sino por la extrapolación del análisis que se puede aplicar a otros mercados.
La volatilidad nos indica que podría haber movimientos bruscos
En el siguiente gráfico se muestra la volatilidad a 50 semanas del café. Este gráfico no es infalible, sin embargo, nos podría estar anticipando lo que podría pasar.
Resulta curioso observar como las subidas son, al menos sobre el gráfico, más bruscas que las caídas. Curioso, digo, ya que en bolsa suele ocurrir lo contrario. Además, suelen ocurrir entre 1 y 3 años después de periodos de baja volatilidad. No estamos diciendo que el café vaya a revalorizarse, ya que esto dependerá de la ley de oferta y demanda que indicábamos al principio, pero sí debemos estar atentos ante variaciones bruscas que se puedan generar en el mercado durante el próximo lustro.