¿Qué está pasando con DIA? Muchos se preguntan cómo ha podido desplomarse un grupo internacional tan potente en el sector de la distribución. Y es que, su valor en bolsa ha caído el 37%. En Economipedia desentrañamos las causas de la caída de las acciones de DIA.
Los mercados son muy sensibles a las predicciones de los futuros resultados. Por ello, el informe de JP Morgan ha caído sobre DIA y sus accionistas como un jarro de agua fría. El banco de inversión estadounidense, anticipando los malos resultados, rebajó el precio unitario de sus acciones de los 2,10 euros a los 1,70 euros.
Importante caída en las ventas
Las razones para que JP Morgan emitiese un informe desfavorable se basan en la caída de las ventas de DIA. Si se comparan las ventas del tercer trimestre de 2018 con las ventas del tercer trimestre del año anterior, observamos que estas han caído un 9% con respecto al año anterior.
Y como suele ser habitual, a menores ingresos por ventas, menores beneficios. He aquí otro argumento por el que JP Morgan ha rebajado el valor de DIA. Tomando como indicador el EBITDA, que es el beneficio antes de impuestos, intereses, depreciaciones y amortizaciones de la empresa, vemos que este quedará entre los 350 millones y 400 millones de euros. Se trata de una cifra notablemente inferior al EBITDA logrado el año anterior.
Consecuencias de la crisis en Argentina
Para colmo de males, DIA, que desarrolla buena parte de su volumen de negocio en países como Brasil y Argentina, se está viendo muy perjudicada por la crisis que arrastran ambos países. La mala marcha de la economía en Argentina y Brasil se ha hecho notar en los ingresos de DIA, que continúan decreciendo desde 2016.
En relación con Argentina, es posible que la caída sea aún mayor. Esto se explica porque las empresas que operan en Argentina tendrán la obligación de adaptarse a las normas contables para economías con hiperinflación. La aplicación de esta normativa podría conllevar consecuencias patrimoniales negativas que no se han incluido en las previsiones sobre DIA.
Profit warning y suspensión del dividendo
La propia DIA ha echado más leña al fuego al anunciar un “profit warning”. Recordemos que un “profit warning” o advertencia del beneficio es una comunicación de la empresa a los accionistas en la que informa de la caída del beneficio. Generalmente, un “profit warning” suele realizarse unas dos semanas antes de que la empresa cotizada publique sus resultados. En este sentido, DIA hará públicos sus resultados el 30 de octubre (dentro de dos semanas).
Esta clase de anuncios van acompañadas de consecuencias negativas en las empresas cotizadas. De ahí que las acciones de DIA se desplomen en bolsa. Ahora bien, el desplome del grupo de distribución español no es consecuencia de un mal día o de una situación pasajera. Se trata de una situación que se viene arrastrando desde hace tiempo, pues los inversores llevan dos años recelando de su modelo de negocio.
Otra consecuencia del denominado “profit warning” ha sido la suspensión del dividendo para el año 2019. Este tipo de decisiones son frecuentes cuando una empresa afronta una situación financiera apurada. En lugar de repartir liquidez entre sus accionistas, emplea los recursos financieros disponibles para atender deudas, cubrir costes o realizar inversiones que permitan remontar el vuelo.
Cambios en la directiva y una posible OPA
Los efectos de una importante caída de ventas como la que sufre DIA, no solo tienen consecuencia sobre su valor bursátil. En toda compañía, suele responsabilizarse a la directiva de las consecuencias negativas de su gestión. Por ello, Ana María Llopis, ha presentado su dimisión como presidenta. Los malos resultados también le costaron el puesto de consejero delegado a Ricardo Currás.
Las grandes caídas de valor de DIA parecen ser la antesala de una OPA. La sociedad LetterOne Investment, en manos del multimillonario ruso Mikhail Fridman, se sitúa como la gran candidata para hacerse con el control de DIA. Así pues, LetterOne Investment, ha dado indicios de ir preparando el terreno para adquirir el control de DIA. Stephen Du Charme, como consejero de LetterOne Investment se ha encargado de sustituir a Ana María Llopis en la presidencia y LetterOne, controlando el 29% del capital, se encuentra muy cerca de la posesión del 30% del capital que es necesaria para poder emprender una OPA.
Con DIA cayendo en picado, la posible OPA de LetterOne podría producirse a un precio muy beneficioso para los intereses del multimillonario Mikhail Fridman.
Será interesante ver cómo evoluciona la situación de DIA. En el horizonte planea la sombra de una OPA y muchos permanecen a la espera de un nuevo plan estratégico que permita resurgir a la compañía.