Existen muchas dudas sobre si las políticas económicas de los Estados, entre las que destaca en este artículo el Ingreso Mínimo Vital, son suficientes para corregir las desigualdades. Por esta razón, nos preguntamos: ¿Ayudaría el Ingreso Mínimo Vital a reducir esas desigualdades? ¿Sería una medida efectiva?
Uno de los objetivos principales que persiguen las políticas económicas de los distintos gobiernos es lograr una distribución más justa de la riqueza. Es aquí donde entran en juego las transferencias sociales.
No obstante, hay que resaltar que el grueso de las transferencias sociales lo conforma el gasto en pensiones. Todo ello supone dejar a un lado a colectivos especialmente vulnerables a las grandes recesiones, como ocurre con la juventud y con las unidades familiares.
Diferencia entre Ingreso Mínimo Vital y Renta Básica Universal
Es aquí donde surge la idea de establecer, como parte de las políticas del Estado de Bienestar, un Ingreso Mínimo Vital. Ahora bien, conviene dejar clara la diferencia entre Ingreso Mínimo Vital y Renta Básica Universal, pues es frecuente confundir estos conceptos.
Así pues, el Ingreso Mínimo Vital es una transferencia social destinada a aquellas personas que padecen una situación de especial vulnerabilidad económica. Para ello, quienes reciban esta ayuda, deben situarse en un bajo nivel de ingresos y deben ser población activa (que trabaje o busque empleo de manera activa), sin olvidar otra serie de estrictas condiciones adicionales que deben reunir los beneficiarios. A todo ello, hay que añadir que el IMV actúa como un complemento a los ingresos obtenidos por el trabajo.
Por el contrario, la Renta Básica Universal estaría al alcance de todos los ciudadanos. En este sentido, las condiciones para acceder a la renta básica no son tan específicas como en el caso del Ingreso Mínimo Vital. En otras palabras, cualquier ciudadano podría acceder a la Renta Básica Universal a pesar de su nivel económico y de su situación laboral.
Sin embargo, muchos se preguntarán: ¿Qué efectos tiene la implantación de un Ingreso Mínimo Vital? ¿Y cuáles serían las consecuencias de una Renta Básica Universal? ¿Cuáles han sido las distintas experiencias en el mundo? ¿Realmente ayuda a reducir las desigualdades? ¿Contribuye a eliminar la pobreza? ¿Mejora las perspectivas socio laborales de sus beneficiarios?
Para ello, veamos algunos precedentes en el mundo.
El Ingreso Mínimo Vital en Europa
Son numerosos los países de Europa en los que se han instaurado distintos sistemas similares al Ingreso Mínimo Vital. Así, encontramos rentas que se otorgan de manera incondicional y rentas que permiten combinar los ingresos del trabajo con la percepción de una renta mínima. Si bien es cierto que, por lo general, para poder percibir la renta mínima, es imprescindible cumplir una serie de requisitos en cuanto a nivel de ingresos.
El Ingreso Mínimo Vital en Francia
El caso francés, posibilita percibir la denominada Renta de Solidaridad Activa, al tiempo que se obtienen los correspondientes ingresos del trabajo. Cabe mencionar que esta renta solo será accesible a personas con muy reducidos niveles de ingresos y que superen los 25 años.
El Ingreso Mínimo Vital en Alemania
En Alemania, la gran potencia económica europea, existe una Renta Mínima de Subsistencia que permite hacer frente a los gastos de alojamiento y calefacción. Para poder beneficiarse de esta prestación se requiere haber trabajado en Alemania, vivir en el país, un bajo nivel de ingresos y que haya concluido la prestación por desempleo.
El Ingreso Mínimo Vital en Austria
El sistema austriaco resulta muy estricto a la hora de acceder a este tipo de ingresos mínimos. Para ello, será necesario acreditar un bajo nivel salarial y las cantidades que se perciben de otras prestaciones. Por tanto, las cantidades dependen de la situación familiar y personal, sin olvidar que estos ingresos pueden permitir cubrir el coste del alojamiento y de la calefacción.
El Ingreso Mínimo Vital en Finlandia
Resulta llamativa la experiencia finlandesa. Tratando de extraer conclusiones sobre la implantación de una renta básica, otorgaron prestaciones a 2.000 personas independientemente de sus ingresos. Aunque mejoró la situación de estrés de quienes percibían esta renta, los efectos no fueron claros a la hora de conseguir un empleo. Por otra parte, hay que valorar que esta renta básica tuvo una duración limitada de dos años. Y es que, el experimento finlandés presenta ciertos interrogantes. ¿Qué hubieran hecho los perceptores de la renta al transcurrir dos años? ¿Quitaría incentivo a la búsqueda de un puesto de trabajo?
Los sistemas de protección en Europa del Este son reducidos si los comparamos con los países nórdicos o Europa Occidental. Y es que, por lo general, las prestaciones no alcanzan el 50% del salario mínimo. Así, en la República Checa se exige un bajo nivel de ingresos, fruto del trabajo o, al menos, un firme deseo de trabajar, mientras que en Polonia basta con no alcanzar un umbral mínimo de necesidad.
El Ingreso Mínimo Vital en Reino Unido
En Reino Unido, el ingreso mínimo se articula mediante el llamado Crédito Universal. Así, se otorgan beneficios fiscales, prestaciones para una casa, apoyo, entre otras ventajas, a quienes perciben bajos ingresos y subsidios por desempleo entre muchos otros. Cabe señalar que los beneficiarios (personas con bajos niveles de ingresos) de estas ayudas pueden conjugarlo con los ingresos que obtienen, fruto de sus respectivos trabajos.
El experimento de Alaska
En el estudio del impacto de estas transferencias sería interesante analizar lo ocurrido en Alaska. Gracias a los ingresos procedentes de la actividad petrolífera, toda la población de Alaska puede percibir unos 2.000 dólares cada año. De hecho, esta política no es nada nuevo, pues se implementó en el año 1982.
Respecto a sus efectos, hay que tener en cuenta que ha permitido disminuir la pobreza. Si bien constituye una transferencia de dinero importante hacia los ciudadanos de Alaska, con 2.000 dólares anuales no basta para subsistir. Por tanto, podría concluirse que esta ayuda funciona como un complemento que no desincentiva la búsqueda de un puesto de trabajo en este caso.
Una consecuencia que puede observarse en Alaska, tras la aplicación de esta medida, es una gran importancia del trabajo a tiempo parcial. En este sentido, podría deducirse que este tipo de transferencias influyen negativamente sobre el tiempo de trabajo, fomentando el incremento de jornadas de trabajo a tiempo parcial frente a los puestos de trabajo con jornada completa.
Este incremento del empleo a tiempo parcial se debe a la falta de requisitos para acceder a esta ayuda. Por tanto, para evitar esta clase de impactos sobre el trabajo sería conveniente establecer una serie de requisitos de acceso en cuanto a nivel de ingresos, situación familiar y social.
Reflexionando sobre el Ingreso Mínimo Vital
Son varias las consideraciones que deben hacerse sobre el Ingreso Mínimo Vital. Es importante valorar sus efectos sobre la distribución de la riqueza, si mejorará la calidad de vida de quienes perciben bajos ingresos, el coste que supondrá para las arcas públicas y los problemas que pueden surgir en la gestión de estas ayudas.
El establecimiento de una transferencia como complemento a personas que perciben bajos ingresos puede contribuir a la reducción de la pobreza, permitiéndoles llevar una vida digna. Ahora bien, a la hora de implementar este tipo de medidas, conviene establecer unos requisitos muy claros para poder acceder al Ingreso Mínimo Vital. Es importante permitir que el Ingreso Mínimo Vital sea compatible con trabajos de baja remuneración. De ese modo, se evitarán problemas de economía sumergida.
La gestión de esta clase de transferencias supondrá que la Administración deba movilizar una gran cantidad de recursos, pues, en este tipo de ayudas, resulta imprescindible contar con un importante aparato burocrático de control y gestión.
Más aún, la aprobación de un Ingreso Mínimo Vital supone un gran desembolso de recursos públicos. Todo ello supone una mejora del Estado de bienestar, trayendo consigo un incremento del gasto público que habrá que sufragar con subidas de impuestos.
José Antonio dice
Gana más las personas que coge la renta minima vital que personas que trabajan / esas personas nunca trabajaran
Kaori dice
Algunas personas no tenemos ninguna otra posibilidad
Manuel dice
No sé si he entendido bien pero me parece que si un ingreso mínimo se contempla como complemento de un salario escado o insuficirnte, me pregunto ¿no estará subvencionando al patrón antes que al asalariado?
José Antonio Ludeña dice
Hola Manuel,
Muchas gracias por tu pregunta. El Ingreso Mínimo Vital se contempla como un complemento del salario para aquellas personas que se encuentran en riesgo de exclusión. Si no se aplica bien si que se puede convertir en una subvención para el empleador antes que beneficiarse el asalariado. En el caso de aquellos Estados con un salario mínimo establecido, se hace más complejo que se convierta en una subvención para el empresario.
Espero haberte ayudado.
Un saludo de todo el equipo de Economipedia 🙂
Ruben Alomia dice
El dilema no es si es útil o necesaria la renta básica sino el cuánto y el cómo de ella. Si no se garantiza la sobrevivencia de los pueblos entonces ese derecho de sobrevivencia estaría por encima del de propiedad y del de otros mas, y eso justificaría o legitimaría la violencia. El cuánto significa que cantidad sirve para cubrir ese mínimo vital y qué se ha de entender como mínimo vital. y el cómo si se requiriese un tipo de trabajo o servicio a la comunidad por ello, o su capacitación laboral, así sea desempleado o empleado parcial o completo con bajo ingreso, de no haber un mínimo salarial digno.
Nora I Palacio dice
Como empleado tenemos un incremento básico q nos fortalece
A mejorar nuestras calidad de vida. Y también como empleado debemos ayudar al crecimiento de nuestra empresa.
José Antonio Ludeña dice
Hola Nora,
Muchas gracias por tu comentario. Es cierto que el Ingreso Mínimo Vital supone una gran ayuda a una persona se encuentra buscando trabajo.
Espero haberte ayudado.
Un saludo de todo el equipo de Economipedia 🙂