Agio
El agio se define como un beneficio, comisión o rentabilidad obtenidos con el cambio de moneda o el descuento de medios de pago como el pagaré . En relación al mercado bursátil es la diferencia entre el valor paritario y de mercado de un título.
La palabra agio en realidad tiene varias definiciones. Nos hemos centrado en las dos más importantes, la relativa al mercado de divisas o el bursatil. De esta forma, sería una especie de premio que se obtiene por la diferencia entre el valor real del papel moneda o de un título y su valor de mercado. Existe otra palabra «desagio» que es la opuesta a la anterior. Consiste en aprovechar la depreciación de ciertos valores para pagar un precio menor por ellos.
No debemos confundir ninguno de estos conceptos con el agiotaje. Este último tiene como objetivo la especulación financiera abusiva. En este caso, se produce un perjuicio a terceras personas y se utiliza información privilegiada para sus fines. Por tanto, la diferencia es desde un punto de vista ético e incluso legal.
Origen del agio
Su origen etimológico es italiano, celta y germano. Por un lado, la palabra italiana «aggio» que quiere decir intercambio de monedas, aunque otro significado es añadido, del verbo añadir. Por otro, la raíz celta y germánica «azh» o «az», que quiere decir algo que es fácil o cómodo.
Respecto al origen histórico, todo comenzó con el patrón oro, que se inició en el siglo XIX y supuso una revolución. Los billetes y monedas tenían una referencia en este metal precioso y esto permitía emitir papel moneda. De esta forma, se entregaba oro a cambio de billetes. Este fue el origen del dinero que conocemos hoy. Este tipo de cambio era relativamente constante y este índice se conocía como «par perfecto de referencia».
En el capitalismo mercantil del siglo XIX el comercio era la principal actividad. De esta forma, el tipo de cambio de mercado de las monedas de dos países se establecía por medio de la balanza comercial. Este solía ser diferente al par perfecto, situándose por encima o por debajo y permitiendo la obtención de un beneficio o agio. A partir de aquí, el término se generalizó para transacciones de divisas o títulos bursátiles, entre otros.
Ejemplos de agio
Para terminar te mostramos algunos ejemplos de agio, según sus dos definiciones principales. La relativa al mercado monetario y al bursátil.
- En el siglo XIX el valor de mercado de la moneda de las dos grandes potencias europeas (Inglaterra y Francia) no solía coincidir con el de referencia del patrón oro. Al final era la, como ya hemos mencionado, era balanza comercial la que establecía el tipo de cambio y sus fluctuaciones provocaron la aparición de una prima de riesgo llamada agio.
- En el mercado bursatil, la diferencia entre el valor de mercado y el paritario da lugar a la aparición del agio. Este se expresa en porcentajes. Por ejemplo, si el valor de mercado de es de 1.000 unidades monetarias y el paritario de de 1.100, el agio es del 10%.