El estadounidense Bernard Madoff (1938-2021) fue un conocido inversionista y financiero de Wall Street. Pese a estar al cargo de una de las firmas de inversiones más relevantes de Nueva York, se le conoce por haber llevado a cabo una de las mayores estafas piramidales de la historia.
La estafa de Madoff alcanzó no solo a las élites norteamericanas, sino que llegó a afectar a las élites mundiales. Juzgado y condenado por haber estafado unos 64.800 millones de dólares, terminó falleciendo en prisión.
Orígenes y expansión de Bernard Madoff
Nacido en el seno de una familia de tres hermanos, un joven Madoff de 22 años había acumulado 5.000 dólares trabajando durante el verano. Con este capital inicial crearía la empresa de inversiones Madoff Investments Securities.
Con el tiempo, su popularidad y la de su firma de inversiones iría en aumento. De hecho, la empresa de Madoff fue una de las pioneras a la hora de incorporar nuevas tecnologías en sus operaciones. Esta decidida apuesta por la tecnología llevó a Madoff a jugar un importantísimo papel en la creación del mercado de valores NASDAQ, un índice que incluso podía hacer frente a un mercado como Wall Street. Con el tiempo, el propio Madoff llegaría a presidir el consejo de administración de NASDAQ.
La espectacular progresión de Madoff en el mundo de las finanzas llevó a sus familiares a incorporarse a la compañía. Por otra parte, sus familiares también ocuparían puestos destacados en entidades reguladoras de los mercados.
Todo ello auparía a Madoff a la cima del mundo de las inversiones.
La gran estafa piramidal
Si por algo se recuerda a Madoff es por ser el responsable del mayor esquema Ponzi o estafa piramidal. El esquema Ponzi había demostrado ser un modelo de estafa con desastrosas consecuencias económicas, sin embargo, nunca antes se había llevado a cabo a una envergadura como la de Madoff. Esta gran estafa comenzaría a fraguarse a finales de los 80.
El esquema Ponzi, denominado así en referencia a su creador, el timador italiano Carlo Ponzi, no resulta muy complejo a la hora de ponerlo en práctica. Para ello, Madoff ofrecía suculentas rentabilidades y prometía inversiones seguras.
Tras haber captado a los primeros clientes, Madoff, en lugar de llevar a cabo las inversiones, se dedicaba a buscar un número aún mayor de clientes. Así, con el dinero de los nuevos clientes pagaba a los primeros clientes las espectaculares rentabilidades que les había ofrecido. De esta manera, se entra en una espiral de pagos de grandes rentabilidades con los fondos aportados por los nuevos clientes. Con la estafa yendo en aumento, cada vez se hace más necesario ampliar la cartera de clientes.
Para burlar el control institucional, Madoff aportaba explicaciones poco concretas o fraudulentas respecto a la procedencia y movimientos de los fondos. Por otra parte, el gran prestigio del que gozaba Madoff en el mundo de las finanzas le servía como una cortina de confianza para proteger sus oscuras maniobras.
Ahora bien, el modelo piramidal que Madoff llevó a cabo era insostenible en el tiempo. Un esquema Ponzi no puede perpetuarse, pues llegará un momento en el que no sea posible dar con nuevos clientes y la estructura piramidal terminará colapsando, dejando con los bolsillos vacíos a los inversores más vulnerables.
Para entonces, Madoff ya se había hecho con un buen botín.
Estalla la pirámide de Madoff
La caída del banco de inversiones Lehman Brothers en 2007 y la subsiguiente recesión serían los acontecimientos que harían colapsar la estructura fraudulenta de Madoff.
Tras casi 20 años de estafa piramidal, famosos actores, bancos, aseguradoras, fundaciones y empresas habían dejado que Madoff gestionase sus supuestas inversiones. Precisamente, con la recesión arreciando y el miedo reinando en los mercados, fueron muchos los que optaron por retirar fondos. Así pues, sus inversores solicitaron retirar un total de 7.000 millones de dólares. De acuerdo con lo declarado por Madoff Investments Securities, la retirada de tal cantidad no significaba un embrollo, pues afirmaban ser un fondo de 60.000 millones de dólares. La realidad resultó ser mucho más cruel, pues dichas cifras eran completamente falsas.
Madoff convocó a sus hijos y les ofreció entregarles importantes sumas de dinero en forma de bonus. Sus hijos exigieron saber cuál era el origen de aquel dinero y cuando Madoff les reveló la procedencia del dinero, fueron ellos mismos quienes lo pusieron en conocimiento de las autoridades.
Para pagar las cantidades estafadas por Madoff se subastaron bienes de la familia, aunque no pudo resarcirse todo el daño. Y es que, dicho sea de paso, no todos los inversores lograron recuperar su dinero.
La familia Madoff fue repudiada socialmente y cayó en la desgracia. Mark, el hijo de Bernard Madoff, se suicidó en 2010 y, en 2014, su otro hijo, Andrew, terminó falleciendo como consecuencia de un cáncer.
En cuanto a Bernard Madoff, condenado a 150 años de cárcel en 2009, murió en prisión, en Carolina del Norte (EEUU), en 2021.