Precio de mercado
Dadas las características de un mercado competitivo, se alcanza un determinado punto en el que los productores maximizan su beneficio y los consumidores su utilidad. Suele decirse que lo que ocurre es que vacía el mercado, ya que se ha alcanzado un punto de equilibrio. El precio resultante será el conocido como precio de mercado.
Siguiendo con las premisas de la competencia perfecta, el precio de mercado es una referencia que señala hasta donde estarán los consumidores de ese mercado dispuestos a pagar por el producto en cuestión y, simultáneamente, desde qué cantidad de dinero partirán los productores para comercializarlo.
Lo anterior se explica desde la misma definición, ya que dicho precio está construido a raíz de la interacción e intersección entre oferta y demanda.
Función del precio de mercado
El precio de mercado cumple con una importante función informativa en la vida económica. Pues es un buen indicador de situaciones de exceso de oferta o de demanda en mercados. Un precio de mercado alto puede significar escasez o una altísima demanda. Mientras que, por otro lado, un precio de mercado más bajo suele ser consecuencia de bajos niveles de demanda o alta competencia.
Claro está que lo anterior es lo que ocurre en una situación ideal y teórica. En el día a día existen multitud de factores que hacen que existan varios precios de mercado para productos idénticos. Esto se debe a diferencias relativas a las características del cliente, la situación geográfica, entre otros. Este fenómeno se conoce en economía como discriminación de precios.
Lo más habitual a la hora de realizar análisis sobre precios de mercado es fijar un precio medio de los datos con los que se cuente en un periodo determinado. Para saber el precio medio de venta de un refresco en particular en un país, por ejemplo, será necesario estudiar a qué precios se vende en diferentes tiendas o supermercados.
Precios de mercado de los activos financieros
Existen unos determinados mercados en los cuales el precio de mercado normalmente fluctúa de manera más notable que en otros. Por ejemplo, esto tiene lugar con activos financieros (como puede observarse en la evolución de la bolsa), con materias primas o con los metales preciosos.
Además, en algunos ámbitos suele ser denominado también como cotización o valor de mercado. Como, por ejemplo, en el mercado bursátil a la hora de conocer los precios de una acción.