Elusión fiscal
La elusión fiscal consiste en el uso de mecanismos legales para reducir o evitar el pago de impuestos. Se caracteriza por no contradecir las normas, sino en valerse de sus defectos para obtener un beneficio económico.
En otras palabras, una empresa o persona que recurre a la elusión fiscal está aprovechando vacíos legales para reducir sus obligaciones ante el fisco.
Diferencias y semejanzas entre elusión y evasión
Las principales diferencias y semejanzas entre elusión y evasión fiscal son las siguientes:
- El evasor comete un delito, por el cual hasta podría ser condenado a la cárcel. Sin embargo, quien elude no ha realizado ninguna infracción contenida en el marco legal. Por lo tanto, no existen consecuencias penales.
- El objetivo de la evasión y de la elusión es el mismo: Minimizar la carga tributaria. Por ende, ambas prácticas producen que el Estado reciba menos ingresos de los que podría recaudar.
- La evasión quiebra la ley, mientras que la elusión la estudia minuciosamente.
- La evasión está relacionada a actividades ilícitas y a corrupción. Esto no sucede con la elusión, aunque recurra a prácticas que puedan considerarse al ‘filo de la ley’.
Técnicas de elusión fiscal
Las técnicas más comunes de elusión fiscal son:
- Creación de una sociedad offshore: El inversionista crea una empresa en el extranjero, usualmente en un paraíso fiscal. Luego, pone una parte o toda su riqueza a nombre de esa nueva firma, la cual no realiza ninguna actividad económica. El objetivo de dicha operación es reducir la carga tributaria. Puede ser, por ejemplo, que el elusor sea español y busque evitar el pago del Impuesto de Sucesiones.
- Creación de una sociedad onshore: El inversor funda una compañía en el exterior, y opera desde allí, en lugar de hacer negocios desde su patria. El objetivo del empresario es reducir la carga fiscal evitando, por ejemplo, el desembolso de una alta licencia comercial que cobran en su país natal. Dicho pago es aquel que se exige a cambio del derecho a realizar una actividad económica en una zona específica. A diferencia del caso anterior, aquí sí se está desarrollando un comercio.
- Incluir gastos dudosamente deducibles: La empresa considera, para el cálculo de su utilidad neta, ciertos egresos de los que se puede dudar si están relacionados al negocio. El objetivo de la firma es reducir el monto sobre el que paga, por ejemplo, el Impuesto de Sociedades, aprovechando imprecisiones en las normas.
Formas de perseguir la elusión fiscal
Las principales formas de perseguir la elusión fiscal son:
- Interpretación vía administrativa: La entidad encargada de recaudar los impuestos puede emitir reglamentos especificando situaciones que se puedan considerar de elusión.
- Modificaciones legales: El Gobierno, a través de los legisladores, crea nuevas leyes o cambia algunas ya existentes. Esto, con el fin de reducir las opciones de elusión tributaria.
Ejemplo de elusión fiscal
Veamos un ejemplo de elusión fiscal. Supongamos que Javier Alcázar desea dejar a sus hijos un bien inmueble, pero en su país las herencias son gravadas por un impuesto del 6%.
El señor Alcázar decide entonces crear una empresa en un paraíso fiscal, donde no existe el Impuesto de Sucesiones. Luego, cede la titularidad de su inmueble a esta nueva sociedad, mediante un simple trámite administrativo.
Por lo tanto, al morir el señor Alcázar, sus hijos realizarán la transferencia de la herencia en el paraíso fiscal. Asumiendo que la propiedad está valorada en US$ 25.000, el monto del impuesto eludido sería:
25.000*0,06=US$ 1,500