Pasivo: Qué es, cálculo y ejemplos
¿Qué es el pasivo?¿Cómo se calcula?¿Cuáles son sus componentes? Te explicamos su definición y significado en contabilidad de forma sencilla.
¿Qué es el pasivo?
El pasivo, en contabilidad, representa las deudas y obligaciones que tiene una empresa. Es decir, todo lo que la empresa debe a terceros: proveedores, bancos, Hacienda, etc.
En otras palabras, es una parte clave de la estructura financiera de la empresa y muestra de dónde ha salido el dinero para financiar lo que posee (el activo).
Es utilizado para financiar su actividad y le sirve para pagar su activo, que es la otra parte del balance de situación.
- El pasivo representa las deudas y obligaciones financieras de una empresa, utilizadas para financiar su actividad y pagar activos.
- Se calcula restando el patrimonio neto del activo total, reflejando lo que la empresa debe.
- Se dividen en pasivo corriente (a corto plazo) y no corriente (a largo plazo), basándose en el vencimiento de las obligaciones.

Pasivo: Explicación sencilla
Podemos decir que el pasivo son compromisos de pago que tiene una empresa. Deudas que tiene ahora, pero que surgieron en el pasado.
🔹 Por ejemplo:
Si pides un préstamo al banco, la empresa recibe dinero hoy (activo), pero queda obligada a devolverlo en el futuro (pasivo). Lo mismo ocurre si compras mercancía a crédito, sin pagar en el momento.
¿Dónde aparece el pasivo?
El pasivo es una de los tres elementos patrimoniales del balance de situación, junto con el activo y el patrimonio neto:

- Activo → lo que la empresa posee.
- Pasivo → lo que debe.
- Patrimonio neto → lo que realmente le pertenece a la empresa (es decir, lo que queda si restamos las deudas, es lo que pertenece a los socios).
¿Cómo se calcula el pasivo?
El activo, es lo que se posee, el pasivo lo que se debe y el patrimonio neto son los recursos financieros que pertenecen a la empresa. El pasivo lo podemos calcular como activo menos patrimonio neto:
Pasivo = Activo – Patrimonio neto
Cuando un pasivo aumenta en el balance de situación, al mismo tiempo se reconoce el aumento un activo.En consecuencia, se produce una disminución de otro pasivo o se reconoce un gasto.
¿Por qué es importante el pasivo?
Porque permite saber cómo se está financiando la empresa. No es lo mismo financiarse con recursos propios que con deuda.
Además, un pasivo elevado a corto plazo puede ser peligroso si la empresa no tiene suficientes recursos para hacerle frente. Eso da señales de riesgo financiero.
Tipos de pasivo
El pasivo se divide en dos grandes grupos, según el plazo en el que vencen las deudas:
1. Pasivo no corriente (a largo plazo)
El pasivo no corriente (o pasivo fijo) son las deudas que vencen en más de un año.
Ejemplos:
- Préstamos bancarios a devolver en varios años.
- Bonos emitidos por la empresa.
- Hipotecas.
👉 Este tipo de pasivo permite financiar inversiones grandes, como maquinaria o edificios.
2. Pasivo corriente (a corto plazo)
El pasivo corriente (o pasivo circulante) son las deudas que se tienen que pagar en menos de un año.
Ejemplos:
- Facturas de proveedores pendientes.
- Préstamos a corto plazo.
- Sueldos y salarios pendientes de pagar.
- Impuestos a liquidar.
👉 Este pasivo es más sensible, porque si no se gestiona bien, puede causar problemas de liquidez.
📌 Importante: La diferencia entre pasivo corriente y no corriente no es por el tipo de deuda, sino por el plazo en que se paga.
Consejo para emprendedores o analistas
Atento: Si una empresa tiene muchas deudas a corto plazo y pocos activos líquidos (como dinero en caja o cuentas por cobrar), puede tener problemas para pagar a tiempo. Y eso aleja a inversores, proveedores… ¡y a cualquier banco que pudiera prestarle!
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