Tercio de libre disposición
El tercio de libre disposición en una herencia constituye una porción del patrimonio sobre la que la persona fallecida o causante tiene plena disposición para designar heredero a la persona que quiera sin necesidad de que sea su familiar.
Es decir, el tercio de libre disposición es aquella parte de la herencia que puede dejarse a cualquier individuo, sin tener que existir un vínculo familiar.
Para comprender mejor el significado y utilidad de este concepto utilizado en el derecho testamentario o civil sucesorio, vamos a explicar cómo funciona la herencia.
Dentro de una herencia existen tres tercios. La ley civil relativa a la herencia y testamentos define y regula las posibilidades que tiene el fallecido de otorgar testamento relativo a estos tres tercios.
- Tercio de legítima estricta: Es el tercio que obligatoriamente han de recibir los descendientes del causante por derecho propio.
- Tercio de mejora: El causante tiene cierto grado de disposición. Solo puede ser mejorado para los descendientes.
- Puede dejárselo a todos o a algunos o uno de los herederos forzosos (los hijos).
- Puede dejarse a descendientes que no sean los más próximos en grado, por ejemplo, dejárselo a un nieto y no a un hijo.
- Tercio de libre disposición: El fallecido o causante puede disponer libremente de él, es decir, puede dejárselo a cualquier persona sea familiar o no.
Características del tercio de libre disposición
Las características esenciales del tercio de libre disposición son:
- Este tercio otorga la facultad de premiar a una persona que no es familiar o de premiar a un familiar (descendiente o ascendiente). Las causas suelen ser de carácter personal.
- El tercio de legítima estricta y el tercio de mejora siempre tienen que ir a los descendientes, ya sea de primer grado de consanguinidad (en la legítima estricta) o descendientes independientemente del grado (para el tercio de mejora). El tercio de libre disposición puede dejarse a ascendientes, es decir, a los padres del causante.
- Debe quedar expresamente señalado en el testamento del causante a quién se deja este tercio de libre disposición, sino será repartido a los descendientes. No existen tercios de libre disposición tácitos y por ello no pueden aparecer en una sucesión intestada, es decir, sin testamento, sin voluntad de la persona fallecida.
Ejemplos
Para comprender mejor su utilidad vamos a ver tres ejemplos:
Ejemplo 1 – Sucesión testada
A muere y se abre su testamento. Tiene tres hijos B, C y D. En su testamento deja a sus hijos la legítima (obligación legal) y expresa su deseo de mejorar a sus hijos B y C. Deja el tercio de libre disposición a su amigo H.
Sus bienes ascienden a un valor de 90.000 euros.
- Primero: Sus hijos B, C y D tienen derecho a su parte de la legítima, por tanto, su tercio de 30.000 euros se divide entre tres y a cada uno le pertenecen 10.000 euros de legítima.
- Segundo: En el testamento A quiere mejorar solo a dos hijos, B y C. Por tanto, el tercio de mejora de 30.000 euros se divide en dos y cada hijo recibirá 15.000 euros.
- Tercero: El tercio de libre disposición es para H. Por tanto, H recibirá 30.000 euros.
- Dinero total que se lleva B –> 10.000 + 15.000 = 25.000 euros.
- Dinero total que se lleva C –> 10.000 + 15.000 = 25.000 euros.
- Dinero total que se lleva D –> 10.000 euros.
- Dinero total que se lleva H –> 30.000 euros.
Ejemplo 2 – Sucesión testada sin mención a la mejora
A muere, y se abre su testamento. Tiene tres hijos B, C y D. Aunque quería mejorar a sus hijos C y D, no dejó expresadas sus últimas voluntades en el testamento. Deja el tercio de libre disposición a su amigo H. Por tanto:
Como no hay ninguna expresión de voluntad respecto a mejorar a un hijo, tanto el tercio de mejora como el de legítima se unifican y serán divididos a partes iguales entre los hijos.
Ejemplo 3 – Sucesión intestada
A muere, pero no deja testamento. Tiene tres hijos B, C y D. Aunque quería mejorar a sus hijos C y D y dejar su tercio de libre disposición a H, no dejó expresadas sus últimas voluntades en el testamento. Por tanto:
La herencia al completo se dividirá entre los tres hijos a partes iguales:
- Dinero total que se lleva B –> 30.000 euros.
- Dinero total que se lleva C –> 30.000 euros.
- Dinero total que se lleva D –> 30.000 euros.