Capital inicial
El capital inicial es el fondo de dinero necesario que una empresa pueda iniciar sus operaciones. Con dichos recursos, podrá adquirir los activos y realizar todos los trámites obligatorios para comenzar su actividad.
Es decir, el capital inicial es aquel con el que se adquieren los equipos y las instalaciones necesarias para que la compañía pueda desarrollar su producto o servicio. Además, la firma debe obtener las licencias o permisos correspondientes.
El capital inicial puede tener dos tipos de fuentes, el capital propio de los accionistas o los fondos de terceros. Estos últimos pueden captarse solicitando un crédito bancario, emitiendo bonos, con subvenciones del gobierno, recibiendo apoyo de inversores ángeles, o incluso recurriendo a herramientas más modernas como el crowdfunding. Esta última consiste en utilizar el capital de muchas personas que han hecho pequeñas aportaciones.
Tipos de capital inicial
El capital inicial puede ser de dos tipos:
- Inversión inicial: Corresponde a las máquinas, equipos, establecimientos, licencias y otros requerimientos que mencionamos en los primeros párrafos de este artículo. Los empresarios deben planificar dichas inversiones elaborando un presupuesto y buscando las opciones más eficientes. Puede ser, por ejemplo, que sea menos costoso que algunos trabajadores laboren desde sus casas y que se alquile una oficina pequeña, en lugar de rentar un establecimiento muy grande.
- Capital de trabajo: Son los fondos que requerirá la empresa para mantener su negocio en marcha. Es decir, para poder hacer frente a los desembolsos de corto plazo como pago a proveedores y a los empleados. Para calcular el capital de trabajo se resta el activo corriente menos el pasivo corriente.
Principales gastos del capital inicial
Centrándonos en la inversión inicial, sus principales requerimientos son:
- Gastos preliminares: Son aquellos previos al inicio de operaciones de la compañía y corresponden a estudios de mercado, visitas a posibles proveedores, publicidad, entre otros.
- Gastos administrativos: Se refiere a al coste de las licencias y permisos necesarios para abrir la empresa.
- Gastos en activos físicos: La firma deberá adquirir maquinaria y equipo. Incluso si se trata de una empresa de servicios siempre se requiere de ciertos activos, como ordenadores, para comenzar a operar.
Asimismo, si nos referimos al capital de trabajo, podemos destacar estos otros rubros principales:
- Gastos humanos: Pagos regulares que deben realizarse a los trabajadores de la empresa.
- Proveedores: Pago por los insumos necesarios para desarrollar los procesos productivos o la actividad respectiva.
- Gastos administrativos: Se refiere a ciertos costos fijos para que la empresa pueda seguir operando como el alquiler de la oficina y los gastos por servicios de agua y electricidad.