Fideicomiso revocable
El fideicomiso revocable es un contrato por el cual se transfiere un patrimonio entre dos partes y que puede ser modificado. En España, el fideicomiso es una disposición testamentaria por la cual el fideicomitente establece un orden para heredar (toda o parte de la herencia) y que puede cambiar en cualquier momento antes de su muerte.
En este artículo, nos centraremos particularmente en el fideicomiso como sustitución hereditaria, cuando es una disposición sucesiva y cronológica que se establece por el testador en su testamento. Así, se especifica el orden en el que una herencia se irá transfiriendo de un beneficiario a otro. Si dicha disposición puede cambiar, el fideicomiso es revocable.
Para explicarlo en términos simples, A (fideicomitente) instituye como heredero a B (fiduciario) y dispone que a la muerte de B, le sustituya C (fideicomisario). Eso es un fideicomiso. Lo que le haría revocable es la posibilidad de que mientras A (el fideicomitente) viva, pueda modificar dicha disposición.
Los fideicomisos irrevocables, al contrario que los revocables, no pueden ser modificados una vez se haya inscrito la disposición testamentaria o se haya perfeccionado el contrato.
El fideicomiso revocable tiene cierta ventaja para el fideicomitente, y es que, en vida, dependiendo de las circunstancias, podrá planificar la entrega de su patrimonio cancelando y modificando tantas veces como quiera y según considere. Por ello, también se conoce a este fideicomiso como fideicomiso en vida.
¿Qué se necesita para que haya un fideicomiso revocable?
Para que haya un fideicomiso revocable se necesita lo siguiente:
- Se necesita un patrimonio para que se trate de un contrato inter vivos. Para que el acuerdo tenga validez a la muerte del fideicomitente, es necesario una herencia y que en el testamento se llame a heredar a varias personas.
- El fideicomitente debe estar vivo para que el fideicomiso pueda ser modificado o cancelado. A la muerte del fideicomitente, el contrato se vuelve irrevocable.
- Debe haber tres partes que participen en este fideicomiso: el fideicomitente, quien transmite el patrimonio; el fiduciario, quien lo recibe para guardar o gestionar; y el fideicomisario, el heredero si se trata de un fideicomiso testamentario o, en caso contrario, será el beneficiario del contrato.
¿Cómo se hace este tipo de fideicomiso?
Vamos a ver los pasos para crear este tipo de fideicomiso:
- 1. El fideicomitente debe hacer un inventario del patrimonio que deja en fideicomiso, puede ser todo o solo una parte del mismo.
- 2. Debe señalar la persona que deja como fiduciario y como fideicomisario. Y al haber redactado este contrato legal en vida, podrá cancelarlo o modificarlo en los términos que quiera. Puede modificar el fiduciario o el fideicomisario o la parte del patrimonio que quiere dejar en fideicomiso.
- 3. Este contrato debe ser firmado por el otorgante y por el fiduciario. Tendrá que ser escriturado públicamente, es decir, firmado por un notario.
Todos los fideicomisos revocables se volverán irrevocables con la muerte del fideicomitente o con su declaración de incapacidad judicial.
Ejemplo
Para comprenderlo mejor vamos a ver un ejemplo:
A, el otorgante, tiene un patrimonio constituido por tres cuentas bancarias. Decide hacer un fideicomiso sobre una de esas cuentas bancarias para beneficiar a C.
El otorgante podrá revocar el fideicomiso por las razones que quiera, por ejemplo, porque C no se haya casado, o porque haya tenido un hijo, etc.