En Economipedia tenemos el honor de contar con un invitado muy especial. Se trata del economista José María O’Kean, Catedrático de Economía en la Universidad San Pablo de Olavide (Sevilla) y profesor de Entorno Económico en el Instituto de Empresa en Madrid. Vamos a analizar el panorama económico actual con José María O’Kean, abordando cuestiones como la difícil situación económica de Argentina, la posibilidad de nuevas recesiones, el impacto de las TIC en la economía, el aumento de las tensiones comerciales y la economía española.
Así pues, José María O’Kean es un especialista en entorno económico, el impacto económico de las TICs, la economía digital y la competitividad empresarial. Además de ocupar distintos cargos en la Universidad San Pablo de Olavide, ha pasado por otras universidades, siendo Senior Associate Member en St. Antony’s College de la Universidad de Oxford e investigador visitante del John F. Kennedy School of Goverment de la Universidad de Harvard.
Como economista prolífico, en su bibliografía encontramos obras como: «Gestión pública estratégica», «Economía para negocios», «Empresarios y entorno económico», «La teoría económica de la función empresarial», «España competitiva», «Entorno económico de los negocios», «Diseñando un nuevo ciclo de valor en la construcción» y su último libro, que se titula «Las diez cuestiones claves para entender la economía». A lo largo de su trayectoria como economista ha publicado gran cantidad de artículos especializados y es habitual verle en medios de comunicación como La Sexta, Antena 3 o Canal Sur. También escribe en diarios de la talla de El País, Expansión, ABC y Cinco Días, sin olvidar que colabora en el Economy Weblog del IE.
P:¿Cree que España avanza hacia una nueva burbuja inmobiliaria?
R: No lo creo. Se está produciendo un ajuste entre la oferta y la demanda. La demanda se ha expandido debido a la mejora económica, la aparición de fondos de inversión inmobiliaria, las mayores facilidades crediticias y el crecimiento del turismo, que ha impulsado la demanda de apartamentos turísticos, ofreciendo una buena oportunidad de negocio para la vivienda que antes se ofrecía en alquiler y para nuevas viviendas a las que ahora se le da esta utilidad, desde que son diseñadas.
Por su parte la oferta es limitada en el suelo disponible y en el tiempo necesario para ajustarse a la demanda creciente.
Unos datos que evidencian este argumento, contrario a la burbuja, es que la vivienda está subiendo principalmente en las grandes ciudades y ciudades turísticas, pero no en otras ciudades del interior o con menor dinámica.
P: En España, las clases medias y las clases trabajadoras han perdido poder adquisitivo. ¿Cuál cree que es la solución? ¿Qué medidas se deben tomar al respecto?
R: Hay que diferenciar la pérdida de capacidad adquisitiva de las clases medias y de los trabajadores. Creo que una tiene un carácter estructural y otra coyuntural.
Si el paro va disminuyendo, los salarios irán subiendo. Si el paro es elevado, los empresarios ofrecen puestos de trabajo a salarios bajos y si los cubren, los salarios no van a subir, máxime con la alta temporalidad del empleo en España, debido a los incentivos de la legislación laboral en estos momentos a este tipo de contratos.
En cuanto al análisis de qué ocurre con la clase media, la explicación es diferente. El salario que se paga por hora trabajada tiene que ver con el valor de lo que se produce en esa hora. Si la economía española se especializa en trabajos que incorporan poco valor, se generan salarios bajos. De otro lado, la revolución tecnológica en la que vivimos origina procesos muy intensos de sustitución de trabajo por bienes de capital, aunque también hace que determinados trabajos no rutinarios y creativos sean más valiosos. Nuevamente la especialización de la economía de un país y su manera de producir marcará la diferencia.
Por tanto, si un país se especializa en trabajos poco productivos y con escaso uso de las tecnologías, difícilmente se van a originar salarios altos y mejora en la capacidad adquisitiva.
Y dejamos el debate especulativo sobre si en el futuro habrá trabajo para todos e iremos a una sociedad en la que la clase media no tendrá trabajo.
P: ¿Cómo cree que está afectando la escalada del proteccionismo al comercio internacional?
R: Tiene que terminar afectándolo negativamente. Es inevitable. Y es una noticia mala para todos, aunque hay países, sectores y personas que saldrán ganando con el proteccionismo, como siempre ha ocurrido. En el fondo, casi todos los países tienen una tendencia proteccionista dado que la política es sensible a grupos de presión nacionales y estos quieren defender sus propios intereses que, casi siempre, la competencia en el mercado amenaza.
Al mismo tiempo, junto a la tendencia proteccionista, nos encontramos con grandes compañías sin carácter nacional, anacionales podríamos llamarlas, que encuentran rápidamente soluciones a estas políticas. Además, cuando hablamos de mercados de bienes-bits más que de bienes-átomos, estos mercados no son tan sensibles a las medidas proteccionistas tradicionales. ¿Puedo poner un arancel a una búsqueda en Google, que genera ingresos para la compañía con el posicionamiento de información en el browser del navegador que veo? Es difícil de hacer.
P: Como especialista en las TIC, háblenos del impacto que pueden tener estas tecnologías en las economías de España y Latinoamérica.
R: Creo que las TIC impactarán en todas las economías. Es evidente que sustituyen con facilidad aquellas tareas más rutinarias que pueden robotizarse de una u otra forma. También es evidente que las grandes plataformas necesitan una masa crítica amplia y esta suele estar en los mercados en lengua inglesa o china.
En cuanto a las empresas que compiten en los diferentes mercados, la economía digital permite comparar precios y reduce los márgenes empresariales. La transformación digital de las empresas será fundamental para competir y, en general, en estas economías la brecha tecnológica es amplia en buena parte del tejido productivo.
P: ¿Qué panorama de futuro visualiza usted para Argentina?
R: Tendría que estudiar más a fondo la situación actual de Argentina. He impartido a lo largo de varios cursos el caso de Argentina en los años de la dolarización y estaba en Buenos Aires en enero de 2002 cuando estalló el sistema de cambios fijo.
En la actualidad los datos sobre el crecimiento son muy contradictorios. Padece una inflación del 30%, una tasa de paro del 9%, y tiene déficits gemelos, exterior del 4,5% y público del 5,7%. La moneda ha pasado en un año de 17 a 38 Pesos por Dólar. El tipo de interés del bono a diez años es del 11, 5% a pesar de no ser un país con una elevada deuda pública, que es alrededor del 30% del PIB. Es un país, además, sin miedo al default, lo cual genera desconfianza en los mercados financieros internacionales. Urge un Plan de Estabilización con todo lo que implica. Si se hace con pacto de rentas, será menos doloroso. En otro caso hará falta un Gobierno muy fuerte para sostener la presión. Si no es el caso, la situación se irá deteriorando en lo económico y lo social. Si en lo político se vuelve a políticas populistas, monetizando déficits y no corrigiendo los ajustes serán muchos años muy duros lo que vienen para los argentinos.
P: A nivel mundial, ¿ve alguna amenaza de recesión?
R: Los países están muy endeudados, muchas empresas están muy endeudadas, muchos bancos están en equilibrios financieros poco sólidos. Por otro lado, en algunas áreas como la europea, vivimos con tipos de intervención muy bajos. Si suben afectará a los agentes con deudas, si se mantienen los tipos de interés, no tenemos margen para incentivar la economía ante una nueva recesión. Es un dilema.
La economía sigue una senda de crecimiento con auges y recesiones. Llevamos muchos años creciendo desde la crisis de 2009. Llegará otra recesión, pero no será como la anterior ni tan global.