Finanzas familiares

Las finanzas familiares son la administración del patrimonio y de los gastos de una persona o unidad familiar. Esto, con el fin de obtener el mejor resultado posible.

Es decir, las finanzas familiares son una rama de la economía que se enfoca en la gestión de las entradas y salidas de dinero de un individuo u hogar. Si bien es cierto que las finanzas familiares, como su propio nombre indica se refieren más a una familia. Si somos más concretos, hablaremos de finanzas personales para el caso de los individuos. Con todo, se podrían utilizar como conceptos muy similares.

Así, lo que busca esta disciplina es definir pautas básicas que permitan a las personas alcanzar una mejor situación económica en el largo plazo.

Las finanzas familiares están muy relacionadas a los hábitos cotidianos. Estos muchas veces generan gastos que se van acumulando en el tiempo y que no identificamos con facilidad o a simple vista.

Aplicaciones de las finanzas personales

Existen muchas formas de aplicar las finanzas familiares, como las siguientes:

• Establecer objetivos de ahorro, ya sea como hogar o para cada individuo del grupo. Esto, definiendo incluso fines específicos como el de reunir un fondo para la educación de los hijos en el futuro.
• Seguir pautas básicas en el uso de productos de financiamiento. Por ejemplo, no usar la tarjeta de crédito dividiendo la devolución en cuotas. Esto, al menos que se trate de la adquisición de un bien de larga duración como un electrodoméstico o un producto de alta tecnología.
• Elaborar el presupuesto familiar, definiendo cuáles son los gastos prioritarios y realizando revisiones periódicas para verificar si se están cumpliendo las metas.
• Los padres deben decidir la manera en la que enseñarán a sus hijos el valor del dinero, inculcándoles, por ejemplo, el hábito de ahorro.
• Mantener una disciplina en el manejo de las obligaciones financieras, evitando el sobreendeudamiento y el pago excesivo de intereses.

Importancia de las finanzas familiares

Las finanzas familiares son importantes porque están muy relacionadas con la educación financiera. Así, es importante que los padres enseñen a sus hijos cómo manejar su dinero, y que también exista un curso sobre dicha materia en las escuelas.

Afortunadamente, cada vez existe más conciencia sobre la importancia de transmitir conocimientos financieros desde temprana edad. De ese modo, en la vida adulta será más sencilla, por ejemplo, al utilizar productos financieros y elaborar presupuestos.