Bienes sociales
Los bienes sociales tienen como objetivo principal la satisfacción de necesidades sociales individuales o colectivas y pueden ser generados por empresas o por el propio Estado.
Es decir, son bienes que benefician a todo el mundo. Además, tienen un coste marginal nulo y no es posible excluir a nadie de ellos.
A su vez, satisfacen necesidades sociales de la propia estructura política y económica predominante en cada país. Lo ideal es que estos bienes acaben convirtiéndose en derechos sociales.
La problemática de los bienes sociales
Hay bienes o servicios que en las sociedades, tal y como están estruturadas, son básicos y podrían considerarse sociales, con independencia de la cuestión ideológica. Además, las necesidades de los países desarrollados difieren de las de otros que puedan estar en vías de desarrollo. Por eso, administrarlos requiere de una gestión de no mercado.
Por otro lado, hay que tener en cuenta que son producidos por alguien, sea público (bienes públicos) o privado. Esto significa que en ocasiones no se garantiza el acceso a todo el mundo, ya que esto dependerá de los recursos disponibles. Además, se puede dar una situación de monopolio legal cuando el que los suministra es el Estado.
También puede darse un «conflicto de intereses» si es gestionado por empresas privadas. De hecho, pueden producirse situaciones delicadas si no se realizan los procesos concursales con absoluta transparencia. La corrupción política, en este caso, puede ser un problema.
Requisitos de los bienes sociales
Todos los bienes sociales, con independencia de quién los suministre, tienen unos requisitos comunes. Estos van dirigidos a satisfacer las necesidades sociales de los ciudadanos:
- En primer lugar, una vez estén a disposición del público lo estarán para todo el mundo por igual. Por tanto, aquí no existirán diferencias debidas, por ejemplo, al poder adquisitivo.
- Por otro lado, no se da el «principio de exclusión» que caracteriza al bien privado. Se puede consumir de forma simutánea por todos.
- Además, no se produce rivalidad en el uso. Es decir, el consumo por parte de uno no reduce la disponibilidad para otro.
- No se puede calcular el beneficio individual, sino que este es colectivo. Pero no todos lo perbirián de igual forma.
Ejemplos de bienes sociales
Algunos ejemplos de bienes sociales son:
- La sanidad: En el mundo existen sistemas sanitarios para todos los gustos: públicos, mixtos o privados. Además, con independencia de las preferencias individuales, cada país es un mundo en cuanto a eficacia y eficiencia se refiere.
- La educación: En este caso es principalmente pública o concertada, excepto en el ámbito universitario donde lo privado es muy relevante. Hay ciertas propuestas por parte de pensadores liberales sobre los llamados «cheques educativos». Estos permitirían elegir el centro al que llevar a los hijos en un mercado libre.
- La seguridad: En todos los países del mundo la ofrece la Administración Pública, en lo que a la policía o el ejército se refiere. Con independencia de algunas teorías sobre su privatización, es un bien público. Eso sí, pueden darse servicios de seguridad privada pero no son bienes sociales, ya que no cumplen las condiciones expuestas con anterioridad.