Reaganomics
El término reaganomics fue acuñado para referirse a las políticas económicas de corte liberal llevadas a cabo por Ronald Reagan en la década de los ochenta.
Por tanto, estamos ante una palabra que se forma por la contracción de dos. Por un lado, Reagan, que es el apellido del expresidente de los Estados Unidos (EEUU) y por otro, economic o economía. Así, se refiere a las políticas económicas de su legislatura.
Hay que tener en cuenta que Ronald Reagan pertenecía al partido republicano de corte conservador o liberal. Por tanto, estamos ante políticas económicas que se basan en la reducción de impuestos o gasto público y en la disminución de la regulación en los mercados.
Situación histórica del reaganomics
Ronald Reagan fue presidente de los EEUU desde 1981 a 1989. En la anterior legislatura gobernaba Gerald Ford (1976) y el país tenía una serie de problemas relacionados con el desempleo, alta inflación y la ausencia de crecimiento, la llamada estanflación.
De esta forma, el expresidente basó su discurso en un camino diferente al de sus predecesores. Su propuesta era bajar impuestos y gasto público para alimentar el crecimiento. Todo ello acompañado de planes de desregulación. Así, la promesa se cumplió, pero solo a medias.
La teoría económica y el reaganomics
Las políticas económicas planteadas por Ronald Reagan tienen un apoyo en las escuelas de economía liberales. Estas son partidarias de la no intervención en los mercados y de las reducciones de los gastos e ingresos públicos para promover el crecimiento.
El razonamiento económico es el siguiente. En primer lugar, al bajar los impuestos, esto repercutirá en una mayor renta disponible y permitiría aumentar el consumo y el ahorro (inversión). Ambos son necesarios para el crecimiento económico medido por el PIB.
Por otro lado, la desregulación del mercado permitiría una mayor eficiencia y productividad en las empresas. Ya no tienen la necesidad de dedicar un enorme esfuerzo en tiempo y dinero para cumplir con regulaciones que son demasiadas veces innecesarias, según esta escuela.
El problema de la deuda pública
El reaganomics consiguió, en los ocho años de legislatura, cumplir sus dos principales promesas. Pero, a su vez, incrementó el gasto público militar, debido al enfrentamiento con la Unión Soviética y al interés de Reagan por prevalecer en este conflicto.
Al final, se produjo un efecto contradictorio en cierta medida. Mientras bajaban impuestos y gastos, aumentaba la deuda pública. Para poder colocar esa deuda en el mercado, se incrementaron los tipos de interés.
Esto provocó un efecto «crowding out» y la inversión privada se vio desplazada por esa deuda pública, ahora más interesante para los inversores. Al final acabó repercutiendo en el crecimiento, provocando su ralentización. Una vez más, la economía demuestra que es una ciencia compleja.
Las críticas al reaganomics
Para terminar y a modo de resumen, veamos algunas críticas de las políticas llevadas a cabo en la era Reagan. Algunas ya las hemos mencionado.
- En primer lugar, el gasto público sí se redujo, pero solo un tiempo. De hecho, la razón entre el gasto público y el PIB alcanzó su nivel más alto desde la I Guerra Mundial.
- Algunos autores defienden que quizá el crecimiento vino del incremento de la demanda agregada vía deuda pública y no por las medidas implementadas.
- Entre 1981 y 1982 se produjo una recesión que algunos autores asemejan a la gran depresión, disparándose el desempleo a casi el 11%. Todo ello vino provocado por una subida sin precedentes de los tipos de interés como forma de frenar la inflación.
- El incremento del gasto militar, unido a la bajada de impuestos provocó que muchos gastos de tipo social fueran desatendidos.
- Podemos mencionar que hubo crecimiento económico e incremento de la productividad bajo el reaganomics. Pero, quizá ese gasto militar pudo provocar situaciones no deseadas que llegaron incluso a anular los efectos de esas mejoras, según algunos expertos.