Precio sombra
El precio sombra es el valor que presenta un bien determinado, teniendo en cuenta que no existe un precio definido de dicho bien en el mercado. Aunque no presente un precio concreto, este se le atribuye en función del coste que tendría dicho bien en un mercado de competencia perfecta, incluyendo los costes asociados.
En otras palabras, el precio sombra representa el coste de oportunidad de producir o consumir un bien o servicio determinado. Pues, al no presentar un coste de mercado, la valoración debe hacerse a través del análisis costo-beneficio, incluyendo todos los costes asociados, tanto sociales como privados.
En otras palabras, es el significado del multiplicador de Lagrange, el cual representa la variación de un objetivo dado cuando se cuenta con una unidad adicional de un cierto recurso limitado.
La Q de Tobin, para hacernos una idea, es un precio sombra.
El precio sombra, de la misma forma, es una de las derivaciones más importantes del método de programación lineal.
¿Para qué sirve el precio sombra?
Al tratarse de un término matemático, en ocasiones puede parecer un concepto muy enrevesado. Sin embargo, a continuación se muestra un ejemplo para entender mejor dicho concepto.
Imaginemos, por tanto, que tenemos una empresa que desea minimizar el coste de una función de producción. Para ello, conoce los precios de los factores de producción, pero desconoce el precio del producto que va a lanzar al mercado.
Para ello, la empresa trata de asignar un valor a dicha producción a través de lo que denominamos “precios sombra”, calculando para ello el coste de oportunidad de producir esos bienes, y no otros distintos.
De esta forma, el precio sombra indica cómo el valor, máximo o mínimo, de la función responde a un cambio unitario en la restricción o condición.