Ley de Parkinson
La ley de Parkinson afirma que la ejecución de una tarea se demorará a lo largo de todo el tiempo que tengamos disponible para hacerla.
La ley de Parkinson es una ley que tiene que ver con el trabajo y la productividad. Y es que defiende que cuanto más tiempo tengamos acotado para realizar una tarea, más se tardará esta en llevarse a cabo.
Por ejemplo, si tenemos una tarea que se puede desarrollar perfectamente en dos días y le damos una semana, iremos distribuyendo su ejecución a lo largo de esa semana. Retrasando así la ejecución de otras diferentes.
Hay que destacar, antes que nada, que esta ley no dice que el problema sea trabajar poco tiempo y dedicar el resto a otras cosas. Si no a que se gasta mucho tiempo en aspectos del trabajo que poco van a aportar al resultado final, más allá de demorar el propio resultado.
En este gráfico vemos claramente lo que nos transmite esta idea. Imaginemos que el tiempo corresponde a una jornada de ocho horas. No vamos a estar ocho horas a tope, como si nuestra vida dependiera de ello.
El cuerpo y la mente se cansan, bajando el ritmo y la intensidad de trabajo. Por ello, muchas horas de esas ocho serán de baja intensidad, realizando tareas superficiales o de menos desgaste.
La idea que transmite esta ley es que se puede aglutinar el trabajo en menos horas, aumentando la productividad y el tiempo dedicado a descansar, ocio u otras tareas. Destacar que el gráfico también puede ser a la inversa. Aglutinar todo el tiempo al final, sería el claro ejemplo de la planificación de un estudiante de cara a un examen.
Contexto
Esta ley fue desarrollada por Cyril Northcote Parkinson, en un ensayo para The Economist, y lo hizo a través de un ejemplo cómico. En él contaba como una mujer, que tenía todo un día para enviar una carta, lo hacía a lo largo del mismo. Desperdiciando mucha cantidad de tiempo para tareas que se pueden hacer en pocos minutos. Esta mujer tardaba una hora en buscar la postal, otra hora buscando sus gafas, media hora en buscar la dirección, más de una hora redactando la carta, etc.
Dos años más tarde, en 1957, el autor desarrolló esta idea en un libro que, dicho sea de paso, consiguió un éxito considerable. Esta obra la redactó basándose en la experiencia vivida en el Servicio Civil Británico, burocracia al servicio de la corona británica. Donde observó la siguiente tendencia: que el número de empleados públicos aumentaban aún bajando la presencia y medios del imperio británico. Esto se debía al aumento de empleados al servicio de un mando y de que los empleados públicos repartían el trabajo hacia otros empleados.
Principios de la ley de Parkinson
Son tres las leyes principales derivadas de este trabajo del autor:
- El trabajo se expande hasta rellenar la totalidad de tiempo que le hemos dado para ejecutarlo.
- Los gastos también se expanden hasta cubrir todos los ingresos.
- El tiempo que se le dedica a una tarea es inversamente proporcional a la importancia de la misma.
Ejemplos de la ley de Parkinson
Estudios
Somos un estudiante al que el profesor ha mandado realizar un trabajo sobre la vida y obra de un autor literario para dentro de una semana. Sabemos que es un trabajo que, dedicándole el 100% de nuestro tiempo fuera de clase, se acabaría en tres días. Pero, como disponemos de siete, dedicamos uno a buscar bibliografía; dos a leerla y a buscar qué información vamos a poner; otros dos a redactar su biografía; un día para redactar su obra, y otro para repasar el trabajo.
Como vemos, hemos ocupado los siete días, malgastando el tiempo que podíamos haber dedicado a otros trabajos si este lo hubiéramos acabado en tres días.
Consultoría
Una empresa que busca ayuda de una consultora para ser más eficiente y ganar más cuota de mercado. Sabemos que el trabajo podría efectuarse en una semana, pero se realiza en tres. ¿Por qué? Porque la consultora gasta más tiempo del que debería para recabar información, llevar a cabo el informe y entregárselo a la empresa.
Y, al igual que en el caso anterior, en vez de hacer rápido el informe para tener más tiempo para informes a otras empresas, el hacerlo más lento supone perjuicio tanto para la consultora como para el cliente, que mientras que no recibe el trabajo está tardando en implementar las nuevas medidas.
¿Qué hacer contra la ley de Parkinson?
Esta teoría es principalmente una ley que pone de manifiesto la ineficiencia en el trabajo. Por lo tanto, las medidas a tomar favorecen la productividad. De hecho, se estaría de acuerdo en trabajar menos horas si estas son más productivas. Algunas de estas recomendaciones son las siguientes:
- Planificar las tareas que debemos efectuar: Si sabemos qué tenemos que hacer para conseguir el objetivo, este será más fácil de alcanzar.
- Establecer plazos exigentes: Debemos alcanzar el equilibrio entre exigencia y estrés. Es decir, asumir tanta carga de trabajo como sea posible sin que este nos sobrepase. Ya que podríamos conseguir el efecto contrario.
- Dividir el día en bloques de trabajo pequeños con descansos breves.
- Luchar contra la procrastinación: Enfrentarnos a las tareas es mejor que posponerlas, ni se va a hacer sola ni va a desaparecer.