Orden espontáneo: Qué es, cómo funciona y ejemplos

Definición De Orden Espontáneo

¿Qué es el orden espontáneo?

La teoría del orden espontáneo dice que la sociedad se organiza sola gracias a lo que las personas saben y a su habilidad para trabajar juntas, sin que haga falta que un organismo lo planee todo.

  • Es una teoría sobre el origen y la evolución de las instituciones y costumbres en la sociedad.
  • Se basa en el conocimiento acumulado por las generaciones pasadas, más que en la planificación de los gobiernos.
  • Tiene grandes repercusiones en la teoría económica.

En economía, es un concepto muy ligado a la defensa de los mercados libres, especialmente por parte de la Escuela Austríaca.

¿Cómo funciona el orden espontáneo?

En otras palabras, podríamos definirlo como el orden que surge con base en la interacción humana, y que con el tiempo se va perfeccionando. Algunos mecanismos prácticos, como el de prueba y error, suelen ser fundamentales en este sentido.

De esta manera, se admite la capacidad del hombre para acumular un conocimiento colectivo a lo largo del tiempo, a veces inconscientemente, y así crear formas de relacionarse basándose en esa experiencia.

Para entender mejor el concepto, pensemos en un ejemplo que todos conocemos: los juegos infantiles. En muchas ocasiones, basta con dar a un grupo de niños un juguete o una pelota para que empiecen a jugar, sin tener siempre definidos los parámetros para hacerlo.

Por ello, es habitual que el modo de organizarse y las reglas del juego no sean algo definido de antemano por los adultos. Más bien al contrario, los mismos niños van definiendo estas cuestiones a través de su propia experiencia, a medida que juegan.

Se forma así un orden dinámico, que va evolucionando gracias a la interacción de quienes participan en él. Pero no solo es dinámico, sino también espontáneo, ya que ha surgido sin la necesidad de ninguna autoridad planificadora que determine las reglas del juego.

De hecho, deportes como el fútbol o el boxeo, surgieron de un modo similar. Aunque hoy estén sujetos a reglas definidas por organizaciones internacionales, en realidad estos organismos solo dieron uniformidad a unos parámetros que, con algunas variaciones, ya existían en el deporte popular desde muchos siglos atrás.

El orden espontáneo en la sociedad

El derecho consuetudinario sería un mecanismo similar al de la experiencia acumulada que va perfeccionando las reglas de un juego a lo largo del tiempo

Los defensores del concepto de orden espontáneo consideran que algunas realidades fundamentales para la sociedad nacieron de esta manera. Desde su punto de vista, una de ellas sería el lenguaje humano, que sería una construcción progresiva de los propios individuos para colaborar y entenderse mejor.

Otro ejemplo sería el derecho consuetudinario, es decir, las normas jurídicas basadas en las costumbres. Una fuente del derecho que, recordemos, tiene un gran peso en la tradición cultural anglosajona.

En este caso, el origen del derecho común anglosajón se encontraría en el siglo XI, a partir de la conquista normanda de Inglaterra. Ese cambio de régimen habría dado lugar a dos sistemas legales paralelos: uno para los nuevos dirigentes, con mayor influencia del derecho romano, y otro para los antiguos habitantes del país, basado en las viejas costumbres sajonas.

Este segundo sistema, a pesar de ser modificado por disposiciones de los reyes ingleses, habría sido en realidad un proceso evolutivo a lo largo de los siglos, gracias a la jurisprudencia. Para los defensores del orden espontáneo, este sería un mecanismo similar al de la experiencia acumulada que va perfeccionando las reglas de un juego a lo largo del tiempo, de forma análoga a los deportes que hemos comentado.

El orden espontáneo en economía

Todo el mundo suele entender que la producción del grupo se maximiza cuando cada uno se especializa en lo que mejor sabe hacer

La economía, por su parte, es uno de los campos donde los defensores del orden espontáneo ven más ejemplos de este concepto. Uno de ellos sería una realidad fundamental para el crecimiento económico: la división del trabajo.

Para entender su origen, pensemos en cualquier serie o película sobre un grupo de personas que deben sobrevivir en una isla desierta. Desde el primer momento, es evidente que cada uno tiene diferentes habilidades.

En este sentido, es posible que la persona más fuerte del grupo pueda cortar madera más rápido que las demás. Pero también podría ser demasiado torpe como para subir a los árboles a recoger cocos o para tejer redes de pesca. De la misma manera, quien sea muy buen cazador puede ser el peor del grupo a la hora de construir herramientas.

En general, todo el mundo suele entender que la producción del grupo se maximiza cuando cada uno se especializa en lo que mejor sabe hacer. En ocasiones, el reparto concreto de tareas puede estar sujeto a una autoridad, pero no se suele cuestionar la propia división del trabajo.

El origen del mercado, bajo esta óptica, también se encontraría aquí, siguiendo un proceso similar. La división del trabajo tiene como consecuencia natural que un trabajador se dedica a producir un bien o servicio en una cantidad superior a la que consume, generando así un excedente. La contraparte de esto, es que no produce nada de todo lo demás que necesita para sobrevivir, lo cual lo obliga a relacionarse con quienes sí lo hacen.

El mercado habría sido, de esta manera, una solución surgida de forma espontánea para intercambiar excedentes.

Un ejemplo: el dinero

La acuñación de moneda por parte de los primeros gobiernos habría sido solamente una regulación de una realidad preexistente

Otro de los grandes avances atribuidos al orden espontáneo es el dinero. Se trata de un tema no exento de controversia, ya que en los últimos siglos, la mayor parte del dinero se ha desarrollado bajo el control de una autoridad política. Pero lo cierto es que, por lo que sabemos, el origen del dinero habría sido muy anterior a los primeros estados.

El punto de partida del origen espontáneo del dinero serían los dos grandes avances que acabamos de explicar: la división del trabajo y del mercado. En pocas palabras, cada trabajador se dedica a producir excedentes de un bien o servicio. Luego, los intercambia por lo que él mismo no puede producir.

En este sentido, la forma de intercambio más asequible para todos sería el trueque. Sin embargo, este modelo presenta graves inconvenientes a la vista de todos, lo que habría incentivado a que las personas buscasen otras formas más eficientes.

El trueque presenta un problema de doble validación: no solo nos obliga a encontrar a alguien que produzca lo que queremos comprar, sino que además esa persona tiene que estar interesada en lo que podemos ofrecer. Como esto no siempre es posible, se hace necesario comprar algún bien que sea demandado por todos, para luego utilizarlo como medio de pago para comprar lo que necesitamos.

Así, la humanidad habría pasado por una gran cantidad de formas de dinero (sal, ganado, trigo, etc.), cada una de las cuales presentaba nuevos problemas. Después de un proceso de prueba y error de varios siglos, habría llegado al oro como forma preferente de dinero, dado que soluciona la mayor parte de los inconvenientes de sus predecesores.

La acuñación de moneda por parte de los primeros gobiernos no habría sido, entonces, una invención, sino una regulación de una realidad preexistente.

 Influencia del orden espontáneo en la teoría económica

El mayor defensor de este concepto fue Friedrich von Hayek, uno de los máximos exponentes de la Escuela Austríaca de Economía

En general, los defensores del orden espontáneo suelen ser reacios a la intervención de los gobiernos en la economía. Sus razones se basan en el hecho de la humanidad ha demostrado que puede alcanzar los mayores avances económicos sin planificación estatal. Por lo tanto, también puede hacerlo en nuestros días.

De esta manera, el intervencionismo del gobierno sería más bien un estorbo para la capacidad de innovación humana. Además, introduce el riesgo de crear incentivos falsos que puedan distorsionar el funcionamiento de realidades como el mercado, el trabajo especializado o el dinero.

En la teoría económica, quizás el mayor defensor de este concepto fue Friedrich von Hayek, uno de los máximos exponentes de la Escuela Austríaca de Economía. Desde un marco filosófico liberal, Hayek defendía los mercados libres de intervención e incluso la privatización del dinero.

Sin embargo, también podemos encontrar ideas similares en autores anteriores de la misma escuela económica, como Ludwig von Mises y Carl Menger. Para algunos autores, incluso hay un precedente en el concepto de mano invisible desarrollado por Adam Smith.

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Federico J. Caballero Ferrari , 02 de marzo, 2024
Orden espontáneo: Qué es, cómo funciona y ejemplos. Economipedia.com