Libre comercio
El libre comercio es un enfoque económico que defiende la eliminación de las trabas a la actividad económica de los agentes. En el interior del país se traduce en libertad de empresa con mercado libre, y en el exterior, en libre cambio.
El libre comercio aboga por que los agentes tengan la mayor libertad económica, de manera que puedan comerciar tanto dentro como fuera del país sin obstáculos. En el ámbito interior, esta libertad económica engloba varias libertades: libertad de precios, de horarios, de contratación, etc. Por otro lado, en el ámbito exterior constituye el librecambismo, es decir, la oposición al proteccionismo.
Para que el libre comercio sea efectivo, debe existir un sistema que asegure el cumplimiento de los acuerdos entre privados y defienda los derechos básicos de consumidores y empresas. De esta forma, el Estado tiene un rol de garante del sistema jurídico y de negociador con otros países que compartan sus principios y deseo de comerciar.
Cabe mencionar que el liberalismo económico es la tendencia de pensamiento económico que promueve el libre comercio como la mejor forma de alcanzar el desarrollo económico a través de aprovechar las ventajas comparativas de los países, alcanzar mayores economías de escala, promover la destrucción creativa y suprimir los privilegios de grupos de interés protegidos por alguna regulación injustificada.
Libre comercio interno
Cuando nos referimos al libre comercio dentro de las fronteras de un país, decimos que en el país existe una economía de mercado que promueve la libre competencia entre las empresas por las preferencias del consumidor.
En esta situación, se espera que las empresas sean libres de entrar o salir del mercado y que los precios de los productos se definan por la interacción de la oferta y demanda. El Estado por su parte, tendrá un rol subsidiario actuando en situaciones en las que el mercado falla (la competencia no es posible o se ve limitada). Así, el gobierno debe funcionar como garante de los derechos de propiedad, de los derechos de los consumidores y del cumplimiento de los contratos o acuerdos legales.
El libre comercio se opone a la intervención estatal que obstaculice el ejercicio de la actividad económica por parte de los agentes. Así, se opondrá a medidas como el salario mínimo, el control de precios o las regulaciones excesivas. Se trata de una posición defendida por el liberalismo.
Características del libre comercio interno
Entre las características del libre comercio interno destacan:
- Libre entrada y salida de empresa.
- Libertad de iniciativa empresarial.
- Precio determinando por la interacción entre oferta y demanda.
- Consumidores cuentan con información y son libres de elegir entre los distintos oferentes.
Libre comercio externo
En el caso de libre comercio externo, este se refiere a una situación contraria al proteccionismo en donde los países pueden intercambiar bienes y servicios libremente aprovechando sus ventajas comparativas.
Para que el libre comercio externo se facilite, los países suelen firmar tratados de libre comercio que generalmente implican una progresiva reducción de los aranceles y de cualquier otra barrera artificial al comercio (como por ejemplo cuotas de importación, barreras burocráticas, etc).
Características del libre comercio externo
Entre las características del libre comercio externo destacan:
- Los bienes finales, y también los insumos o bienes de capital, pueden ser transados libremente a través de las fronteras.
- Aranceles reducidos o inexistentes.
- No existen barreras artificiales al comercio como cuotas de importación/exportación, límites a la inversión extranjera, imposibilidad de contratar trabajadores extranjeros, etc.
Ventajas y desventajas del libre comercio
Los defensores del libre comercio aseguran que este permite que los consumidores puedan disfrutar de una mayor variedad de productos y servicios a un precio más accesible debido a la presión de la competencia. Asimismo, el libre comercio permitiría que los países aprovechen mejor sus ventajas comparativas (recursos, conocimientos, ubicación, etc.).
No obstante lo anterior, también existen críticos que aseguran que se destruye a las empresas locales que no pueden competir con los precios de países extranjeros con bajos costos de mano de obra. Así, por ejemplo, se suele criticar la competencia que imponen los textiles provenientes de China, cuyo costo de elaboración es mucho más bajo que en países más desarrollados debido a que estos últimos pagan salarios más altos y tienen mayores obligaciones para con sus trabajadores (protección contra accidentes, seguros, vacaciones, etc.).
Ventajas del libre comercio
Los defensores del libre comercio argumentan que este mejora la calidad de vida de todos. Se basan principalmente en que permite la aparición de economías de escala y la especialización creciente de cada agente, lo que incrementa la eficiencia y la productividad.
Al permitir que cualquiera acceda a la actividad económica en las condiciones que desee, el libre comercio permite que aparezcan más oferentes y demandantes. Así, a través de la competencia, la calidad de vida mejorará beneficiándose de los precios bajos y la necesidad de innovar propulsados por la competencia entre empresas.
La facilidad para participar en el mercado también permite que la oferta se adapte de manera más exacta a la demanda, ya que no se deben seguir regulaciones que impiden ofertar en ciertas condiciones.
Desventajas del libre comercio
El principal argumento en contra del libre comercio es que, en ausencia de regulación, aquellos con más poder podrán abusar de aquellos con menos, imponiendo sus condiciones en los intercambios. Algunos ejemplos son las grandes empresas eliminando a la competencia o las empresas ofreciendo condiciones pobres a sus empleados.
Por lo tanto, se proponen ciertas medidas que equilibren el poder entre ambas partes, tales como el salario mínimo, leyes de protección de la competencia o regulaciones de calidad. Con la intervención en el mercado se busca que éste se desarrolle de manera más justa y sin abusos de poder.
Artículo realizado por Paula Nicole Roldán y Mario Husillos.